La última hora de la salud de Jannik Sinner

Jannik Sinner dio uno de los grandes sustos de lo que va de temporada este lunes en la gran final del Masters 1000 de Cincinnati. Y es que el italiano tuvo que retirarse en el primer set, cuando apenas se habían disputado 23 minutos de partido y Carlos Alcaraz mandaba por un contundente 5 a 0, merced a que el número 1 del mundo era a duras penas capaz de mantenerse en pie. Jugar a las 15:00 de la tarde bajo el calor y la humedad de la ciudad de Ohio no dio los resultados esperados y les costó un duelo que pudo ser histórico, como casi siempre que se miden.

Por otro lado y más allá del Masters 1000, la realidad es que el gran objetivo de estas semanas es otro y pasa por el US Open, el último Grand Slam del año, que arranca este domingo en Nueva York y donde Sinner defiende su corona y el número 1 del mundo. Por eso mismo no se puede permitir el más mínimo contratiempo y este de los muy grandes. Así que ha optado por minimizar riesgos, empezando por bajarse del nuevo torneo de dobles mixtos, pero hay muchos más, pues ya se conocen más detalles de la salud del astro.

Ya en Nueva York y descansando

Para llegar en las mejores condiciones posibles a su debut en Flushing Meadows, Jannik está siguiendo un proceso de mucha calma en el que está priorizando el descanso y relajarse, sin someter a su cuerpo a esfuerzos innecesarios, para tratar de que todo esté en orden antes de que arranque el torneo. Una vez que esto se produzca y aunque las primeras rondas puedan ser más fáciles, la realidad es que lo va a tener que dar todo cada jornada, pero antes puede ir más tranquilo. "Me tomaré un par de días libres y luego volveré al trabajo”.

Por lo pronto se le ha podido ver paseando con su equipo por Nueva York con algo de mejor cara, lo que habla de que las horas le están viniendo bien y poco a poco está con más fuerzas. A poco que esta deriva siga mejorando, muy pronto va a estar al máximo y va a poder saltar a la pista para enfrentarse a los mejores del mundo, con un duelo en la cabeza, el que le podría medir en la gran final a Carlos Alcaraz, al igual que sucedió en Roland Garros y Wimbledon.