Los Lakers confirman su adiós con estrépito

El equipo angelino vuelve a perder ante los Wolves y confirman el fracaso de Doncic y LeBron a las primeras de cambio; los Rockets sobreviven y fuerzan el sexto partido ante los Warriors

Los Lakers confirman su adiós con estrépito
LeBron james felicita a Edwards - @timberwolves

Los Lakers culminan su descalabro. En casa, ante su público, el equipo angelino no fue capaz de alargar la serie ante los Minnesotta Timberwolves y la primera experiencia con Doncic al mando y LeBron aún a pleno rendimiento acabó en un fracaso sonado (1-4). El equipo de JJ Redick volvió a ceder en el último cuarto tras igualar una desventaja inicial para caer por 96-103 ante unos Wolves que han sido mejor toda la serie.

La defensa del equipo de Minneapolis y un Gobert espectacular bajo los tableros volvió a ser clave y frenó el empuje de los Lakers cuando éstos parecían que iban a tomar la delantera a partir del tramo final del tercer cuarto. Doncic (28 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias) y James (22 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias) volvieron a asumir la ofensiva Lakers, y Rui Hachimura (23 puntos) dio un paso adelante ante la menor aportación de Reaves, pero no fue suficiente.

El gran problema de los Lakers no es su juego exterior, sino en la pintura, mermada con la salida de Anthony Davis. Ahí han ganado esta serie los Timberwolves. Los de Minnesotta se apoderarn del rebote (54-37) y ahí, pese a tener unos porcentajes de tiro similares a su rival, cimentaron el triunfo. El francés Gobert, con 27 puntos y 24 rebotes, fue el amo y ni siquiera tuvieron que lamentar la menor aportación de su gran estrella Anthony Edwards (15 puntos, 11 rebotes y 8 asistencias). No les hizo falta para cerrar la serie.

Los Rockets sobreviven al equipo 'B' Warriors

La que sigue muy viva es la que disputan Houston Rockets y Golden State Warriors (2-3) después de que los primeros sí aprovecharan su regreso a casa para ganar por 131-116 y forzar el sexto partido.

Los Warriors, no obstante, demostraron que, en una serie larga, son muy peligrosos y que tienen un fondo de banquillo que puede agotar a cualquiera. Después de que los Rockets, prácticamente, hubieran sentenciado el partido en los dos primeros cuartos liderados por Fred VanVleet, el técnico de los Warriors, Steve Kerr, sentó a Stephen Curry y a Jimmy Butler casi los dos últimos cuartos enteros y, con el equipo suplente, obligó a los Rockets a acabar con los titulares para salvar la victoria.

Los Warriors se situaron a trece puntos y ni eso hizo cambiar la estrategia a Kerr, que tendrá a sus estrellas listas para el sexto partido. No obstante, éstas no habían tenido su noche. Stephen Curry se quedó con 13 puntos y un mal porcentaje de tiro, mientras que Jimmy Butler anotó sólo 8. El mejor de su equipo fue Moses Moody con 25 puntos y 9 rebotes, fruto de ese protagonismo en los últimos cuartos, en los que lideró al 'equipo B'.

Por los Rockets, Fred VanVleet finalizó con 26 puntos, Amen Thompson llegó a los 25 y Dillon Brooks se fue 24. Junto a ello, Alperen Sengun fue protagonista con 15 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias. Un gran despliegue del juego coral que caracteriza al equipo de Houston y que ahora tendrá que volver a hacer gala de él en San Francisco.