Los Lakers ponen nombre al bombazo del mercado

Los Lakers no levantan el pie del acelerador. Pese a tener poco margen de movimiento para reforzar la plantilla, Robert Pelinka busca fórmulas para dar un paso al frente sin perder nunca de ojo una agencia libre; tanto es así que los de oro y púrpura están preparando un traspaso que supondría un auténtico bombazo en la NBA.

Con la presión de LeBron James sobre sus hombros, quien prácticamente ha subrayado que si no montan un equipo para poder ganar otro campeonato podría pensar en marcharse, la oficina de los angelinos se está moviendo para mejorar su backcourt, donde sienten que les falta profundidad. Pues bien, resulta que dentro de la lista que manejan se encuentra un verdadero emblema de los Boston Celtics como es Marcus Smart.

Así es. Según informa Anthony Irwin de ClutchPoints, los Lakers están interesados en hacerse con el que fue ídolo de la afición verde, ya que el plan es conseguir una pieza que les aporte defensa en el perímetro tras perder en la agencia libre a Dorian Finney-Smith.

Si bien Smart ofrece las cualidades que demandan los californianos, no se trata de la única pieza que están siguiendo para completar su puzzle, ya que Matisse Thybulle y Ayo Dosunmu son otros dos jugadores que estarían en la agenda de Pelinka.

Con tantas opciones abiertas, la citada fuente recalca que los Lakers ya han levantado el teléfono para tener conversaciones preliminares con los equipos de cara a conocer el precio que piden por cada uno de sus objetivos; eso sí, por el momento no han realizado ofertas.

Marcus Smart, venido a menos

Pese a que su primer año lejos de Boston fue realmente bueno para irse a un promedio de 14,5 puntos con los Memphis Grizzlies, la campaña 2024-25 ha supuesto un frenazo en su carrera. Golpeado por las lesiones, Smart solo ha podido jugar 34 partidos entre los mencionados Grizzlies y Washington Wizards para quedarse en 9 puntos por encuentro, su peor marca desde el curso 2017-18. Pese a tal dato, los Lakers no le quieren porque vaya a resolverles el ataque, sino porque necesitan un perro de presa en la cancha.