El problema de ganar un oro paralímpico con 16 años: "Después de París me costó un poco tener objetivos"

Encontrar una fuente de motivación tras cumplir todos tus sueños no debe ser tarea fácil. Es exactamente lo que le ocurre a Tasy Dmytriv. La joven almeriense que camina por Bachillerato pudiendo presumir de haberse proclamado bicampeona mundial, medalla de oro paralímpica o recibir condecoraciones como la Medalla de Andalucía del Deporte. Una ristra de éxitos con los que tocó la gloria demasiado pronto. Sus logros tienen numerosas lecturas y todas se resumen en un mínimo común múltiplo que surge de la suma de talento, esfuerzo y decisión. Si bien, el hecho de llegar a la meta con tanta velocidad podría generar dudas en torno a sus futuros objetivos y una posible falta de motivación en la natación para el futuro. En ESTADIO Deportivo, la almeriense reflexiona sobre este aspecto.

Tras los Juegos Paralímpicos de París, a Tasy le resultó difícil encontrar una nueva fuente de inspiración que incentivara una actitud ambiciosa de cara al futuro: "Bueno, pues sí que es verdad que después de París me costó un poco tener objetivos, pero bueno, ahora ya tengo otros".

Con 17 años, esta joven deportista tiene una mente digna de admiración: "Hacerlo lo mejor, bajar mis marcas, que es un objetivo que me anima a seguir nadando y a dar lo mejor de mí y yo creo que mi entrenadora y yo nos hemos centrado en eso para esta temporada y a largo plazo pues tenemos la vista en Los Ángeles".

En este sentido, sus próximos objetivos son superarse a sí misma con nuevas marcas. Un reto que solo pueden marcarse los verdaderos mastodontes del deporte. "Yo creo que cada deportista busca hacerlo siempre lo mejor posible y al final en natación, que son los tiempos, todos los nadadores queremos mejorar ese tiempo".