Reino Unido y la revolución para controlar a los criminales

El gobierno británico se plantea insertar chips a los criminales para poder controlarles ante la falta de espacio en las cárceles

Reino Unido y la revolución para controlar a los criminales
Reino Unido y la revolución para controlar a los criminales - FreePik

La tecnología logra que el ser humano avance mucho más de lo que podría hacerlo sin ella. Realmente es el mismo ser humano quien la desarrolla, pero al mismo tiempo es la propia tecnología la que va evolucionando y la que ayuda a la población a desarrollar las tareas. De hecho, hay muchísimas maneras de usarla que, seguro que hoy en día parecen cosas casi del futuro o imposibles, pero en algunos años serán adquiridas por la mayoría de la población. Eso es lo que ha ocurrido con la inteligencia artificial, que desde hace unos años entró en la vida diaria.

En ese momento la mayoría de la población casi que se resistía porque tenía miedo a lo que podía llegar a ser. Eso en buena medida sigue pasando, es decir, hay quienes siguen teniendo pánico de cuál es el límite de la IA. Aun así, son muchos más quienes ya la usan diariamente y la han incluido en su rutina igual que en su momento se incluyó internet, por ejemplo. Y es que quienes lo hacen apuestan por darle uso a las tecnologías en lugar de tenerle miedo al cambio. En esa línea de aprovechar los diferentes avances destaca el gobierno de Reino Unido, que quiere usar la inteligencia artificial para controlar los crímenes y reducir así la presión que sienten las cárceles en cuanto a presos.

Una política controvertida

Ha sido a principios de este mes de julio cuando esta idea ha tomado seriedad y carácter de posible. Y es que ya en enero se habló de que la inteligencia artificial iba a revolucionar los servicios públicos, por eso se han unido para resolver el problema de las cárceles, ya que no quedan huecos. Se ha tratado por tanto de un encuentro con un tono urgente porque se siguen produciendo crímenes y delitos, pero las cárceles ya están llenas. En esta línea, ante la imposibilidad, a corto plazo, de aumentar las infraestructuras penitenciarias, se ha planteado como frenar los hechos ilegales.

La idea está por tanto en tratar de controlar a los delincuentes a través de la geolocalización, de manera que fuera de la cárcel se tengan que comportar casi como si estuvieran dentro, es decir, correctamente. Con lo cual la idea es insertar un chip con inteligencia artificial en los que cometan crímenes y delitos, que sirvan para tenerlos controlados y para que por tanto no vuelvan a reincidir. Según algunas cifras, esto podría reducir hasta en 10.000 los presos que están abarrotando las cárceles británicas.