La isla vecina en la que vive la tarántula más grande de Europa

Se encuentran en medio del Océano Atlántico, aunque estos tres islotes portugueses son unos auténticos desconocidos. Y eso, a pesar de que pueden divisarse desde la exuberante Madeira. Al horizonte de esta conocidísima isla portuguesa, en dirección sudeste, aparecen en el océano un pequeño grupo de islas que conforman una reserva natural protegida. Está deshabitado y es el refugio natural de las tarántulas más grandes de Europa.

Junto a Madeira, Porto Santo y las Islas Salvajes, dan forma al archipiélago de Madeira. Estos islotes son conocidos como Ilhas Desertas, un pequeño archipiélago formado por Ilheu Chao, Deserta Grande y Bugio, pertenecientes todas al municipio de Santa Cruz (Madeira). En nuestros días tan sólo se pueden visitar con autorización previa, a través de excursiones organizadas en barco, ya que están protegidas al ser reserva natural.

Las Ilhas Desertas no siempre fueron así, contando incluso con algún intento de poblarlas. Desde las primeras exploraciones registradas, a finales del siglo XIV y principios del XV se llevaron a cabo diversos intentos por poblar las islas, aunque resultaron vanos debido a la ausencia de agua potable y la esterilidad de sus terrenos.

La tarántula de las Desertas, las más grande de Europa

Durante el siglo XX los tres islotes eran propiedad privada de dos familias, al igual que las Islas Salvajes. No sería hasta 1971 cuando fueron adquiridas por el Estado de Portugal, empezando a reconocerle su valor ecológico en 1990, declarándolas reserva natural en 1995.

La protagonista de la biodiversidad de estas islas, en concreto de Deserta Grande, es la tarántula de las Desertas; una araña endémica considerada el arácnido más grande de Europa. Puede alcanzar los 12 centímetros de diámetro; es decir, como un CD. Se caracteriza por sus manchas blancas en las patas y se estima que existen unos 2.000 ejemplares de esta especie; todos en esta isla.

Otra de las joyas de la fauna de las Desertas es la foca monje del Mediterráneo, una especie muy rara que se encuentra en un grave peligro de extinción. Según National Geographic, en 1998 la población de este animal se reducía tan sólo a ocho ejemplares, mientras que actualmente apenas alcanza a uno 20 individuos que conforman una pequeña colonia que habita las playas de este archipiélago. Al margen de estas dos especies, las Ilhas Desertas son un reducto de numerosas especies de aves, otro de los rasgos que las convierten en un paraje único para contemplar.