El
Sevilla Atlético recibe en la mañana de hoy
al Jumilla con la necesidad urgente de dar por finalizada su mala racha con una victoria que los saque de los puestos de descenso y los llene de confianza de cara a futuros encuentros.
Para ello, tendrá que superar a un rival en forma, pues el equipo vinícola llega a la cita sin conocer la derrota en los últimos cinco partidos, en los que ha sido capaz de ganar a domicilio (1-2) al líder
UCAM Murcia y empatar la pasada jornada (0-0) en casa del segundo clasificado, Melilla.
Será un reto complicado para el filial sevillista, que tras dos derrotas consecutivas ante 'gallitos' como Cartagena y el propio UCAM Murcia está obligado a sumar tres para no alejarse en demasía de los puestos de salvación. Pese a que los chicos de Luci venían transmitiendo buenas sensaciones e, incluso, llegaron a encadenar cuatro partidos sin perder, los dos últimos encuentros han supuesto un duro freno en una dinámica que ya deben comenzar a recuperar ante los murcianos, un equipo al que el acuerdo de colaboración con el
Wolverhampton, del que cuentan con seis jugadores, parece haberle sentado de maravilla, a tenor de los resultados.
Para este partido, el técnico sevillista tendrá que seguir lidiando con las importantes bajas en defensa, pues esta semana el polivalente Manu Sánchez se ha unido en la enfermería al central Berrocal y al lateral Javi Pérez. Además, Luci tampoco podrá contar, por lesión, con el centrocampista Genaro, ni con el sancionado
Bryan Gil, quien ha sido uno de los bastiones ofensivos del conjunto sevillista en este inicio de temporada.
Por su parte,
el Jumilla solo cuenta con las bajas de larga duración de Manu Miquel y Silvayn Deslandes. Su técnico Leonel Pontes, quien fuera segundo entrenador de la selección de Portugal, volverá a alinear el once repleto de juventud y nacionalidades que tan buenos resultados le ha dado en las últimas jornadas, aunque tratarán de solventar el problema de la escasez de gol (solo un tanto en las tres últimas jornadas), ante un Sevilla Atlético que necesita ya ese partido redondo para que la temporada comience a tomar el vuelo deseado.