Antony: el 'culpable' de su no al Bayern, el bendito "paso atrás" y su "sueño" con el Mundial 2026

"Hombre, para mí fue más emocionante que la primera convocatoria, creo que por todo lo que había pasado. Me emocioné muchísimo, fue un momento en el que no podía parar de llorar. Tuve que esperar un rato en mi habitación antes de bajar a cenar, porque acababa de llegar a Polonia e íbamos a jugar la final de la Conference League. Llegué justo cuando el seleccionador iba a leer la lista. Estaba muy nervioso y, cuando oí mi nombre, fue un momento muy emotivo. No sólo para mí, sino también para mi familia. Llamé a mi esposa, a mis hermanos y a mis padres. Todos estábamos muy emocionados, porque hemos pasado por mucho y, en poco tiempo aquí en el Real Betis, logré dar la vuelta a la situación y volver a la selección", recuerda Antony Matheus dos Santos, que se abre en canal en una entrevista con 'Globo.com'

Una de las muchas dificultades a las que se enfrentó fue una demanda presentada en 2023 por una ex novia que lo acusó de agresión física y amenazas. Esto provocó que el de Osasco fuera excluido de la selección brasileña para los partidos de clasificación para el Mundial contra Bolivia y Perú en septiembre de ese año. En agosto del pasado, el deportista logró demostrar su inocencia y la investigación concluyó sin que se presentaran cargos en su contra. "Cuando digo que he vuelto a ser el 'Antony de la favela' me refiero a reencontrarme conmigo mismo, a encontrarme feliz, a ver a mi familia sonriendo y a poder sonreír de nuevo, porque pasé por momentos muy difíciles donde hasta una sonrisa me costaba mucho. Y, cuando digo que me he reencontrado, es por cómo me han tratado aquí, por el cariño con el que me han recibido todos. En la favela, por muy difíciles que fueran las situaciones por las que atravesaba, era muy feliz. Y pude volver a ver esa felicidad en sí misma; a veces, un simple gesto me alegraba. Así que, cuando uso esa palabra, a eso me refiero, a ser feliz en cualquier circunstancia", añade el extremo, que ya ha firmado 15 goles y ocho asistencias en 37 partidos como heliopolitano

"¿No vas a marcar ningún gol feo?"

"¡Menos mal que marqué algunos golazos aquí, ¿verdad?! Los jugadores incluso bromean diciéndome 'Oye, ¿no vas a marcar ningún gol feo?'", apunta entre risas el paulista, que se queda con uno por encima de todos: "Claro, está el de la Fiorentina, que es muy importante, porque fue en una semifinal en la que pasamos. El más bonito para mí fue contra el Espanyol, un golazo que marqué en el tiempo de alargue. Pero creo que, en cuanto a importancia, diría que el de la Fiorentina, porque fue un paso muy importante para nosotros". Aunque reconoce que el de vaselina ante el OL, que algunos en redes sociales compararon con uno de Messi en 2007, fue precioso también: "Admiro mucho a Leo. Estoy muy contento de haber marcado ese golazo; lo sigo desde pequeño. Tiene una trayectoria increíble, es respetado por todos, incluyéndome a mí. Siempre lo he seguido, siempre me ha apasionado el fútbol, ​​y me alegra haber marcado ese golazo contra el Lyon".

Gracias, pero no al Bayern de Múnich

"Sí, el mercado de fichajes cerró al día siguiente a las siete u ocho de la noche, si no me equivoco, o a medianoche. El último día que se movieron las cosas con el Betis, igual que ocurrió con el Bayern. Te voy a ser completamente sincero. Me dejó de piedra. Estamos hablando de un gigante mundial, el Bayern de Múnich, donde un entrenador con semejante trayectoria, Vincent Kompany, me llama. Y tenemos una conversación; fue súper amable conmigo, me dijo que siempre le había gustado mucho mi fútbol, ​​y esto fue a las 11 de la noche, un poco después de las 23:00. Y, quisiera o no, me afectó mucho. Por la grandeza del club, la grandeza del entrenador y la forma en que me trató, la forma en que me habló. Pero lo que también influyó mucho en mi decisión fue mi familia. Se trata de velar por mis hijos. Lorenzo (también es padre de una niña, Lavinne) adora este lugar, adora esta ciudad. Cuando estábamos de vacaciones en Brasil, sin saber nada, siempre preguntaba: 'Papá, ¿cuándo volvemos a España?", rememora Antony, que cumplió su compromiso: "Por supuesto, éste es un lugar donde soy muy feliz, donde todos los que me recibieron han sido muy amables. La decisión también la tomé yo, porque me encuentro bien, estoy feliz y porque sé cómo es mi día a día aquí. Además, todo estaba ya arreglado con el club, porque di mi palabra. Todo se acordó verbalmente; no podía hacerme esto a mí mismo ni al club. Así que la decisión también fue, en gran medida, familiar".

Isco

"Siempre he sido un jugador de equipo ejemplar, siempre he sabido cómo afrontar las situaciones de esa manera. Me alegra mucho este reconocimiento, no sóo de él, sino de todo el equipo. Y es un gran honor jugar con Isco. Nos llevamos muy bien, hablamos mucho y, de hecho, bromeamos todos los días. Es bueno que ya esté entrenándose; está cerca de volver. Y es evidente para todos que tenemos una muy buena conexión", admite el atacante, que nunca cortó ese hilo: "Cuando yo estaba en Inglaterra, me escribía mucho diciéndome 'oye, Antony, ¿vienes o no?'. Y yo le respondía: 'No sé, pero casi'. Y ahora que está lesionado (y menos mal que se está recuperando) le dije 'ahora te espero para que podamos jugar juntos y disfrutar de nuestra compañía'. Isco es un gran jugador, y no sólo eso, sino también una gran persona. Me recibió muy bien y nos llevamos de maravilla tanto dentro como fuera del campo".

Mundial 2026

"A pesar de haber participado ya en un Mundial, jugar otro sería un sueño hecho realidad. Claro que estoy ansioso; sueño con ese momento, porque vestir la camiseta de la selección y representar a todo el país es muy gratificante. Sé cuánta gente me apoya y a los que yo represento. Estoy haciendo mi parte, con mucha tranquilidad. Siempre intento mejorar en cada partido, en cada entrenamiento. Soy muy exigente conmigo mismo, y haré todo lo que esté a mi alcance, todo lo que esté en mi mano. Siempre estaré al 100% preparado, haciendo mi trabajo para volver a vestir la camiseta de la selección, porque para mí es un sueño jugar otro Mundial. Sueño mucho con jugar una final. Desafortunadamente, no pude vivirlo en persona; en el último Mundial estuvimos a punto de ganar contra Croacia, pero nos eliminaron. Sin embargo, tener un entrenador como Ancelotti en la selección nos aporta muchísimo, porque es un entrenador muy exitoso. Y, claro, sueño con poder ayudar a la selección brasileña a ganar un Mundial. Seguiré trabajando para lograrlo. Por eso siempre estaré preparado para cumplir esta misión de jugar mi segundo Mundial".

Antonio de Triana

"Eso mismo, al barrio de Triana es como si la ciudad le perteneciera. Y, bueno, estoy muy agradecido por el cariño; no sólo por el apodo, sino desde que llegué, por cómo me recibieron, cómo me trataron, el cariño que me tienen. Aquí siempre me llaman Antonio, y se lo agradezco mucho. Siempre que juego, intento corresponder a todo ese cariño. Todo suma, es increíble, incluso al principio estaba un poco confundido, tuve que preguntar a gente del club y me lo explicaron más o menos".

Sevilla

"¡Hombre, Sevilla es genial para vivir! Venimos de Brasil, un país cálido, y la comida aquí tiene muchas cosas parecidas. Es una ciudad increíble, una de las más cálidas de España. Aunque aquí es invierno, sale el sol todos los días, por la mañana y por la tarde, a diferencia de Inglaterra, donde ya hace frío y llueve. Es muy diferente, una ciudad a la que me adapté muy rápido: la comida, el clima, la vida diaria, la gente también. Los que venimos de Brasil estamos acostumbrados a esto, pero yo, que ahora estoy en España, veo esa diferencia; veo que es muy similar a Brasil y, por eso, me adapté tan rápido. Y el español es más fácil que el inglés, ¿verdad? Se aprende más rápido".

Depresión

"Implica muchas cosas. Mis problemas extradeportivos me perjudicaron bastante y, por consiguiente, la falta de minutos y oportunidades me afectó mucho más, porque soy un jugador muy trabajador. Siempre quiero jugar, quiero estar en buena forma. Y de todo lo que viví fuera del campo es importante mencionar las acusaciones en mi contra. Eso también me afectó mucho, porque soy padre de familia. Así que fue muy difícil para mí, sobre todo porque tampoco estaba jugando; ésa fue otra situación que me afectó mucho".

"Me costaba mucho tener fuerzas para hacer muchas cosas. Me dolía mucho, porque mi hijo, aunque es pequeño, lo notaba a menudo. Y no me gusta que se note; soy una persona que, por mi familia, siempre quiere estar bien, quiere que vean que todo está bien, pero era inevitable. Estas cosas me dolían mucho, porque no quería ser así delante de ellos, pero era casi imposible, porque estaba pasando por una situación que me afectaba bastante".

"Creo que se trataba más bien de acusaciones. Creo que saqué este tema a colación porque me afectó mucho. Tengo una familia, una esposa, hijos. Y, te guste o no, decir que no me afecta es mentira, porque sí me afecta. Es como cuando te excluyen de la selección, te apartan de los entrenamientos y, luego, tienes que demostrar tu inocencia. Así que fue una época muy complicada para mí. No sólo yo, sino también mi familia, sufrimos mucho por esto. Estoy muy agradecido a Dios y a mi familia, que nunca me soltó la mano, siempre intentando mostrarme el lado positivo de las cosas. Y, gracias también a mis hijos, porque cada vez que los miraba, sabía que eran la mayor razón para seguir adelante, porque era por ellos que iba a hacer todo esto que he estado haciendo".

El paso atrás para tomar impulso

"Cuando llegué al Betis cedido, como ya dije, estaba en el United sin jugar, pero trabajaba duro, sobre todo en mi aspecto mental, que es lo más importante para mí. Estaba en buena forma física, porque me entrenaba a diario por mi cuenta, y sabía que en cualquier momento me podían dejar marchar. Tenía que estar preparado. Necesitaba estar en buena forma, y ​​es increíble que, antes de llegar aquí a España, estuviéramos juntos mi hermano Júnior, Cristiano y yo. Y es increíble porque pensaba: "¡Guau, ¿cómo será?".

"Al principio lo vi como un paso atrás, necesitaba dar un paso atrás para estar bien, para volver a jugar, pero es increíble cuando estás mentalmente preparado... Cuando puse un pie en España, ya no lo vi como un paso atrás; lo vi como una oportunidad para volver a estar bien, para ser feliz, para volver a estar en la cima allí".

"Y, gracias a Dios, trabajé mucho en mi mentalidad. Estoy muy agradecido a mi familia por cada consejo, cada conversación, cada momento difícil en el que me mostraron el lado positivo de las cosas. Y, bueno, el resultado llegó, y estoy muy feliz de poder, en tan sólo unos meses, hacer historia aquí en el Betis, y de poder volver a jugar al fútbol, ​​porque no olvidé cómo se juega, no fui a un Mundial en vano. Simplemente se trataba de reconocer que soy un hombre y, por supuesto, estaba el tema de mis errores fuera del campo (Antony incluso publicó que tenía una relación problemática, pero siempre negó cualquier tipo de agresión), con cosas que me afectaron mucho, pero también estoy muy agradecido, porque aprendí mucho de las dificultades, y hoy me siento un hombre mucho más maduro".

Falta de respeto en Old Trafford

"Sí, cuando digo que lo sentí irrespetuoso me refiero también a gente que no viene al caso. Creo que soy de los que no les gusta meterse en polémicas ni dar nombres, pero fue un poco difícil. No sólo un poco difícil, bastante difícil, porque también es muy complicado para mí. No hice la pretemporada y tuve que incorporarme a otro club. Gracias a Dios, siempre me he cuidado bien, así que conseguí llegar aquí (al Betis) en buena forma para el primer partido y jugar los 90 minutos completos. Hacía tres o cuatro meses que no jugaba. No es fácil que el club del equipo se entrene por la mañana y yo a las cinco de la tarde, sin acceso al grupo".

"Sí, sentí un poco que me faltaban al respeto, pero eso también forma parte del proceso. No guardo rencor, no estoy enfadado con nadie. Esta experiencia me ha servido de gran aprendizaje para saber cómo afrontar ciertas situaciones con las herramientas adecuadas y con sabiduría, porque es parte de la vida, parte del proceso. También estoy muy agradecido al Manchester United, porque no solo viví malos momentos allí, sino que también tuve buenos momentos con gente maravillosa que conocí. Ahora estoy aquí en el Betis; mi etapa en Manchester fue una experiencia muy buena y estoy muy contento de estar aquí".

La favela

"Lo superé, ante todo, con Dios siempre a mi lado y mi familia. Y con mucha perseverancia; le agradezco profundamente a Dios la educación que me dieron mis padres, la crianza que me brindaron, porque no es fácil criar a tres hijos viviendo en la favela y evitar que se desvíen del buen camino. Quienes vivimos allí conocemos bien la realidad. Y sabemos cuál es el 'camino más fácil', entre comillas, que lleva a la perdición".

"Mi perseverancia también me ayudó a crecer. Siempre he sido un niño muy discutidor desde pequeño (se ríe), pero siempre afronté las dificultades de frente. Por ejemplo, cuando jugaba en la favela con los chicos y me pegaban, ahí era cuando me defendía. Así que esa perseverancia también me ayudó mucho a llegar a la selección brasileña, a Europa y al momento en que vivo aquí hoy. Creo que la sabiduría y la perseverancia que tuve, además de la educación que recibí de mi familia, fueron fundamentales".

"La favela es un lugar que amo, quiero que quede muy claro para ti y para todos. Siempre la amaré, siempre la llevaré conmigo; es un lugar que me ha enseñado muchísimo. Y la favela me representa profundamente, porque sé lo que es vivir allí, sé lo difícil que es. Y cuando alguien de la favela logra algo, también es mi logro, porque sé que no es fácil. Y la favela me inspira aún más; me inspira a esforzarme más cada día, a mejorar mis estadísticas cada día, a marcar goles cada día, a dar asistencias, porque al final, represento a todos ellos".

"Así que esta inspiración viene de ellos. No es casualidad que lleve el nombre de la favela en mis botas. Es un lugar que amo profundamente, un lugar que llevaré conmigo toda la vida, y siempre que tengo vacaciones intento ir, porque también me da energía. Me hace recordar al pequeño Antony que fui y me muestra en quién me he convertido, gracias a todo lo que viví allí. Por eso, mi inspiración es mirarlos y saber que, dondequiera que vaya, los estaré representando a todos".