'Buena noticia' para el Betis con Antony en el peor momento

Ahora mismo, horas después de derrota contra el Chelsea, cunde la desilusión en el club verdiblanco y en la afición tras una primera parte en la que parecía acariciarse el sueño. Hoy, como es lógico, hay poco consuelo para la parroquia verdiblanca, pues tuvo la miel en los labios en Breslavia, pero no cabe duda que en La Palmera hay motivos de sobra para alzar la cabeza y sentirse más que orgullosos del Betis y de la gran temporada que ha firmado, con su quinta clasificación para Europa consecutiva.

Además, el equipo dio la cara y, más allá de una desconexión durante una fase de la segunda parte que resultó letal, los de Pellegrini compitieron de tú a tú con un todopoderoso como el Chelsea y lo tuvo contra las cuerdas durante buena parte del choque con Isco y Abde como protagonistas. De hecho, el Betis acusó considerablemente la lesión del marroquí que le obligó a abandonar el terreno de juego en el arranque de la segunda mitad, lo que coincidió con el vendaval del Chelsea, que lo generó todo por su banda.

Y es que Abde había marcado el gol y era una fuente de peligro que limitaba además el atrevimiento del Chelsea por su carril derecho, tanto en cuanto la situación la tenía muy controlada en la otra banda, donde se suponía que Antony percutiría continuamente, lo que, sin embargo no ocurrió.

No en vano, el brasileño estuvo muy alejado en Breslavia de la versión que ha asombrado en Heliópolis y al panorama internacional, pues apenas si en apareció o encontró la manera profundizar por el costado diestro, lo que centró la peligrosidad bética por la zona de Abde, perdiendo mucho fuelle cuando entró en su lugar Jesús Rodríguez.

Obviamente, el Betis y el beticismo esperaba mucho más de su estrella en la gran final, que fuera un factor diferencial, pero se mantuvo apagado casi todo el partido después de haber sido el Iluminado en mayúsculas durante toda la cesión.

Un apagón que acusó el Betis, pero que también tiene su lectura positiva aunque ahora cueste verlo, porque su ausencia de protagonismo en un gran escaparate como la final de la Conference League ha pinchado su burbuja en el escenario internacional de cara al mercado, frenado la ebullición despertada en torno a él, lo que puede beneficiar al Benito Villamarín de cara a su intención de retenerle.

Antony, que no pudo conteer las lágrimas tras la derrota, se bajó de la ola en un momento en el que todos estaban pendientes de él y que podría haber disparado más si cabe su cotización, lo que producirá un descenso en el interés despertado y, por ende, que la puja pueda perder fuerza. Un contexto que, dentro de la frustración por haber caído en la Conference Lerague, favorece a los intereses del Betis a la hora de pelear por la continuidad del brasileño, por el que no pagará lo pactado con el Manchester en el caso de conquistar el título.