Claudio Bravo no se lo explica: nunca lo había vivido en 21 años en la elite

Tras una etapa "dura" de tres meses en el dique seco, el meta está ya disponible para Pellegrini, aunque recalca que esta "extraña temporada" condiciona seriamente el rendimiento del equipo verdiblanco

Claudio Bravo no se lo explica: nunca lo había vivido en 21 años en la elite
El de Viluco se ejercita en los prolegómenos del Betis-Dinamo. - CORDON PRESS
Óscar MurilloÓscar Murillo 4 min lectura

Se lesionó en noviembre pasado, en vísperas de un derbi hispalense que, como quiera que Rui Silva también andaba renqueante, disputó a buen nivel Fran Veites. Con una dolencia idéntica a la de su compañero Isco Alarcón (de carácter miotendinoso proximal en la musculatura isquiotibial izquierda), las previsiones con el costasoleño hablan de unos dos meses a lo sumo, aunque Claudio Bravo ha estado tres fuera. No se conoce si hubo recaída o simple precaución gobernada por las sensaciones, porque cada cuerpo es un mundo, si bien el caso es que el chileno aún no ha retornado a los terrenos de juego. Ante Cádiz CF y Dinamo de Zagreb, eso sí, estuvo en el banquillo, disponible para su paisano Manuel Pellegrini, quien podría otorgarle la alternativa este domingo en LaLiga contra el Deportivo Alavés o el jueves siguiente en tierras croatas para quemar las opciones, vía remontada, de acceder a los octavos de final de la Conference League.

"Fue una etapa dura, pues me tocó estar bastante tiempo alejado de la actividad normal como la competencia y entrenamientos diarios. Me ha costado un poco retomar, porque, quiera o no, me tocó en un periodo de plena competencia, a mitad de año", explica el de Viluco a Keno Trotamundos para TNT Sports. Desde el mismo coche del cancerbero, al que Ricardo Gareca ha llamado para que retorne a la selección, el hasta el año pasado capitán de 'La Roja' lamenta que la rotura fibrilar le pillara en "un momento de plenitud" donde sus "sensaciones" eran "buenas en todos los sentidos", un frenazo que achaca a la acumulación inicial de compromisos: "Me tocó estar jugando muchas competencias, pero el tema de las lesiones es así; son parte de la actividad". Al menos, todo ha quedado en el olvido: "Dejé atrás ese paso de la lesión y llevo una semana al completo con mis compañeros entrenándome, metido en las convocatorias y participando casi al 100 por ciento de las actividades diarias".

Con todo, Bravo tiene claro que ausencias como la suya están condicionando el rendimiento del Real Betis, que, por ejemplo, recibió al Dinamo con once ausencias (entre tocados y no inscritos), un panorama idéntico al de la vuelta, pues se sumará Cédric Bakambu, aunque Germán Pezzella es baja por acumulación de amonestaciones. "Ha sido una temporada extraña. De tantos años que llevo en el fútbol, en ninguno me ha tocado tener tantas bajas en un equipo. Creo que sólo hemos logrado completar un día de práctica con todos al 100 por ciento, cosa que no suele pasar casi nunca. Hemos tenido lesión tras lesión; se recupera uno y se lesiona otro. Ante el Dinamo de Zagreb teníamos un montón de bajas, jugadores no inscritos para la competencia, porque vienen saliendo de lesiones y ha sido difícil no tener un plantel completo para generar esa competencia".