La "espinita clavada" de Isco y la emoción de sus hijos... por verle "con Lamine Yamal"

El mediapunta, "un poco más maduro" que la última vez, confía en seguir siendo "el de siempre" y poder "reconectar con el niño pequeño al que le encantaba jugar" con la selección

"Madre mía, no ha llovido nada desde entonces... Contento de volver después de mucho tiempo. La ilusión de jugar con tu selección nunca se pierde. A disfrutar del momento y ojalá ganar. Hay momentos de dudas, sobre todo cuando no te salen las cosas, pero ahí está la importancia de seguir, de insistir, de no rendirte. Al final el fútbol me gusta y la pasión es lo que me ha traído aquí otra vez. Sobre todo la sensación de llegar a un sitio que te quiere, que te da confianza, de reconectar con el niño pequeño, que le encanta y disfrutaba mucho del fútbol. Disfrutar es el secreto", explica Isco Alarcón en los medios oficiales de la RFEF sobre su retorno a 'La Roja' casi seis años después de aquel 3-0 contra Suecia del 10 de junio de 2019, partido de la fase de clasificación para la Eurocopa 2020, que se disputó en 2021 por culpa de la pandemia, responsable en parte de su despedida internacional.

Ahora, después de una grave rotura de peroné (de la que recayó) que frustró, en palabras de Luis de la Fuente, su merecida presencia en Alemania 2024, por fin saborea el éxito: "Las cosas de la vida, que puede golpearte cuando menos te lo esperas. Pasé por el proceso de la lesión, donde me tuve que operar dos veces porque la primera la placa no agarró bien. Otro bache que hay que superar, y lo hice bien. También es verdad que me pilla ya con una edad, con una madurez, que eso me ayudó también mucho". Una frustración que no impidió que apoyara a sus compañeros, entre ellos el ahora villarrealense Ayoze Pérez, en la distancia: "Me pilló de luna de miel en Japón. Buscaba locales o bares donde pudiera verse el partido y la final ya sí que la vi aquí en Madrid, en casa. Muy bien, la verdad. Al final en el fútbol es difícil que gane el equipo que mejor juega y, en este caso, fue muy justo".

Sobre qué ha cambiado desde la última vez, el de Arroyo de la Miel se ve un jugador "un poco más maduro", aunque mantiene su esencia: "Luego, en líneas generales, creo que intento seguir siendo el mismo jugador, de seguir disfrutando, de sacar lo que llevo dentro, de intentar emocionar a la gente con mi fútbol, y estoy muy contento de seguir haciendo lo que me gusta, de volver a la selección y ojalá no se quede en una convocatoria solo". De su pasado con 'La Roja' apenas hay rastro en su casa: "El mayor sí, pero era muy pequeño. Ahora los míos chicos tienen cinco años uno y cuatro el otro, así que no me han visto nunca, pero están más emocionados con que voy a ver a Lamine Yamal que con verme a mí (risas). Así que, bueno, ilusionado también de que me puedan ver con la selección y ya me contarán a ver qué tal, cómo lo viven".

Por último, Isco, que tira de galones y conserva su '22' fetiche pese a que su adiós con España fue con el '10' que le cedió Marco Asensio, quiso agradecer "a la familia en general, que es la que siempre está, la que te dice las verdades cuando te las tiene que decir" por todo lo que le ha aupado estos años: "Por no haberme dejado caer, apoyarme, sostenerme, porque la verdad es que sin ellos, aunque suena a tópico, no habría podido recuperar el buen nivel". Ahora, no quiere volver sólo por volver, sino que espera revalidar el título de la Nations League, para lo que deberán superar a Francia y, después, al ganador del cruce entre Alemania y Portugal: "Llevo viniendo a 'La Roja' desde los 14-15 años, he vivido muchos momentos bonitos, pero es verdad que en la absoluta tengo esa espinita clavada y ojalá podamos ganar esta competición".