Los números de la venta a contrarreloj de Paul del Betis al Espanyol

Los lectores de ESTADIO Deportivo pudieron leer este sábado a mediodía, antes que en ningún medio, sobre las negociaciones entre Real Betis y RCD Espanyol por Paul Akouokou. Un inesperado movimiento de última hora que, de todas formas, ven hoy domingo por la tarde "muy complicado" en las oficinas del Benito Villamarín, a pesar de considerarlo inicialmente factible, pero las partes aclaran que apurarán el plazo con la idea de cerrarlo antes de las 23:59 horas de este martes, aunque ya no ayude a que los verdiblancos puedan reforzarse más en la ventana invernal con Ayoze y/o Bellerín. La razón es que el marfileño no ha renovado su contrato, que expira el 30 de junio de 2024, por lo que este verano sería la oportunidad final de conseguir réditos por su pase. Con la ampliación de Guido Rodríguez sobre la mesa y como prioridad, se trata de una operación, la del jugador promocionado desde el filial, que interesa a todos.

Aquí Paul juega poco o nada, situación que no mejorará con sólo dos competiciones, una hasta marzo, por lo que necesita, a sus 25 años, un destino en Primera división en el que apuesten de verdad por él. Quedarse para seguir a la sombra del italo-argentino no entra en sus planes, razón por la que no firmará una prolongación con pocos visos de hacerle prosperar, a la vez la 'conditio sine qua non' para que el Betis se planteara lo que pretendían la mayoría de sus pretendientes (Rangers, Niza, Nantes, Montpellier...), una cesión con opción de compra. Como el verano anterior, desde La Palmera dejaron claro que sólo se marcharía traspasado y que su precio eran cinco millones de euros. El africano, que ya se buscó la vida por Finlandia e Israel, querría seguir en España, por lo que ha llegado a un acuerdo económico con el Espanyol hasta 2027 a falta de la entente entre clubes.

La contraoferta 'perica', según avanza 'Alfinaldelapalmera.com', es adquirir ahora solamente el 70% de los derechos de Paul a cambio de tres millones, incluyendo una obligación de compra para más adelante, seguramente condicionada al rendimiento del centrocampista defensivo, cifrada en otros dos kilos por el 20%, por lo que los heliopolitanos conservarían siempre un 10% para beneficiarse de una hipotética venta futura de un jugador que apenas acumula aquí 600 minutos, repartidos en 12 apariciones en LaLiga, la Copa del Rey y la Europa League. Mientras tanto, pese a su suplencia este domingo contra el Málaga, al Espanyol se le atraganta la contratación de la que dicen en Barcelona que ha sido siempre su primera opción, el pivote (y a veces central) del Sporting José Gragera (22), que gusta por cierto muchísimo a Cordón y que no renueva de momento un contrato que expira en 2024. Diego Martínez pide a gritos un medio de cierre para dejar de utilizar ahí junto a Vini Souza al defensor Calero, pues ve a Edu Expósito de otro perfil, no se fía de la fragilidad Keidi Bare y no cuenta con Pol Lozano.