El mismo Vitor Roque del Betis: golazo espectacular y pifia escandalosa
Una versión idéntica a la que firmó como verdiblanco se hace notar en el Palmeiras, donde esa mezcla de calidad, voluntad inquebrantable y atenazante autopresión lleva al 'Tigrinho' a ser capaz de lo mejor pero también de lo peor

El mes de mayo ha comenzado con buenas noticias para Vitor Roque. El joven delantero rompió su cesión en el Real Betis el pasado 28 de febrero para ser traspasado por el FC Barcelona al SE Palmeiras y, pese a los sorprendentes ataques de su representante a la entidad verdiblanca retando a comparar a final de curso las cifras de goles anotados por el 'Cucho' Hernández y el propio 'Tigrinho', ha tardado más de dos meses en poder celebrar su primera diana con el 'Verdao'. No obstante, parece que ha cogido carrerilla, pues después de estrenar por fin su casillero anotador el pasado día 4 en un duelo de la Serie A brasileña ante Vasco da Gama, ha repetido sólo cuatro días después, en el choque de la pasada madrugada en Copa Libertadores ante Club Cerro Porteño (0-2).
Fue un partido de pronunciados contrastes para Vitor Roque, que firmó un partido muy en la línea de lo que se pudo ver de su corto periplo en el Betis: muy voluntarioso, generoso en el esfuerzo y hábil para fabricarse sus propias ocasiones; pero también excesivamente tenso, precipitado y atenazado por la presión autoimpuesta de querer marcar diferencias.
Capaz de lo mejor y de lo peor, el de Timóteo falló una ocasión escandalosa en el tiempo añadido de la primera mitad y firmó un golazo en el tiempo de alargue de la segunda parte, ampliando la renta mínima que tenía el Palmeiras gracias a la diana anotada por Estevao y estableciendo el definitivo 0-2 en tierras paraguayas que sirvió al equipo brasileño para sentenciar la primera plaza de su grupo y sellar de manera matemática su clasificación para los octavos de final de la Copa Libertadores.
La increíble pifia de Vitor Roque...
Vitor Roque ha sido protagonista de los 'high-lights' de la jornada en la máxima competición suramericana de clubes por los dos motivos. Por un lado, lo increíble de su error justo cuando se cumplía el minuto 45 y con 0-1 en el marcador. Un zaguero de Cerro Porteño se duerme en un parsimonioso control de un balón aéreo y el exverdiblanco aparece como una bala para robarle la cartera en el círculo central y correr en solitario 50 metros hasta la portería local.
Avanza todo ese trecho sin que le saliese el portero rival y con la ayuda de un compañero libre para definir a placer. El ariete, que ya mostraba evidentes problemas para conducir en una hierba muy alta y se iba dejando el balón atrás, optó por la peor decisión de todas: un chut flojo, al centro y directo al cuerpo del meta paraguayo ante la incredulidad de todos.
... y la redención, a lo grande, del 'Tigrinho da América'
Por suerte para el Palmeiras, pese al fallo estrepitoso, la segunda mitad transcurrió sin demasiados apuros y, justo cuando daba la sensación de que acabaría con 0-1, en el 90+4 iba a llegar la redención a lo grande para Vitor Roque. Golazo... aunque también con esa firma suya de indudable estilo errático. Con tanto miedo de volver a fallar como ganas de acertar.
Acelerado en su carrerón por banda izquierda, en ese afán de dejar atrás al marcador y colarse hasta la cocina, se acabó quedando sin campo; lo que le obligó a recortar en el área a su 'compañero de baile', al portero y a un segundo defensor que llegó a la ayuda, antes de definir con un derechazo a la media vuelta y cayéndose de espaldas, pero marcando esa diana de la sentencia. Lo celebró con seriedad y señalando al cielo. Su segunda diana en cuatro días, después de 10 partidos de sequía. Va arrancando.