El Cádiz Club de Fútbol es un equipo singular que lleva en su ADN la idiosincrasia de la ciudad. Un equipo del pueblo, muy de su gente y que tiene como símbolos las señas de identidad de la capital gaditana. El estadio del conjunto amarillo, situado en primera línea de playa, huele a arena y sal; tiene el color dorado del sol; y, como no puede ser de otro modo, suena irremediablemente al famoso Carnaval de Cádiz. En este sentido, cabe destacar que el club cadista tiene dos himnos situados prácticamente al mismo nivel. Uno es el oficioso, el de la calle, una original invención de Manolo Santander que se escuchó por primera vez en el Gran Teatro Falla en febrero de 1998 y que quedó inmediatamente grabado en los corazones de sus fieles aficionados. Y luego posee otro himno que es el oficial, que data de 1983 y que no tiene letra de chirigota pero evidentemente también está estrechamente ligado a la copla carnavalesca, a la que tanto contribuyó su creador, el maestro Antonio Escobar.
Con música de Antonio Escobar y letra de Rafael Parodi, el himno oficial del Cádiz CF fue entonado por primera vez por la Coral Universitaria de Cádiz en compañía de la Banda de Música del Tercio de Infantería Marina de la vecina localidad de San Fernando. Es una de las señas de identidad más arraigadas y la teoría dice que debe seguir sonando por megafonía de manera protocolaría, aunque cuando el equipo amarillo salta al césped del Nuevo Mirandilla -antiguo estadio Ramón de Carranza- suele entonarse el otro.
Antonio Escobar Perera nació en Cádiz el 8 de Enero de 1918 y falleció a los 88 años de edad el 28 de diciembre de 2006, dos años después de ser nombrado como predilecto de su amada ciudad. Desde niño mostró su habilidad con la música y su obra es extensa a la par que variada. Desde los 16 años miembro de la Banda Municipal de Cádiz, es autor de numerosas marchas cofrades y de música carnavalesca, fue organista de la Iglesia de San Lorenzo y dirigió el coro de San Francisco. No obstante, una de sus piezas más populares es sin duda el himno que compuso en honor del Cádiz CF para conmemorar el ascenso cadista a Primera división en el año 1983. La letra corrió a cargo del prolífico escritor Rafael Parodi Cebada, nacido en Caracas (Venezuela) de padres gaditanos que volvieron a Cádiz cuando él tenía sólo cuatro años. Artística multidisciplinar, además de cultivar la literatura fue profesor de dibujo, escultor, cómico y autor teatral.
Tiene como título 'Himno al Cádiz Club de Fútbol' y dice así:
Cuando salta al terreno de juego
nuestro equipo amarillo se ve
la emoción en todo el graderío
y en el once su alegría y fe.
Al trenzar este juego entusiasta
de uno a otro pasando el balón
para el Cádiz no hay campo contrario
porque pone en el juego pasión.
(Estribillo)
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
sigue un camino triunfal
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
con su juego vencerá.
Alaví Alavá ¡Viva el Cádiz!
Alaví Alavá ¡Viva la afición!
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
llegará a ser campeón.
Los colores que lleva el equipo
amarillo y azul se impondrán
como el sol el color amarillo
y el azul del color de su mar.
El aliento de los gaditanos
y el empuje de nuestra afición
llevará en un día cercano
este equipo a ser campeón.
(Estribillo)
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
sigue un camino triunfal
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
con su juego vencerá.
Alaví Alavá ¡Viva el Cádiz!
Alaví Alavá Viva la afición.
¡El Cádiz! ¡El Cádiz! ¡El Cádiz!
Llegará a ser campeón, campeón.
Por otra parte, al margen del himno del Cádiz CF, existe también un denominado himno oficioso que es el que más se canta en las gradas; hasta el punto de que mucha gente piense que es el oficial. No es así, pero está al mismo nivel. El 'Me han dicho que el amarillo' tiene su origen en el concurso de Carnaval de Cádiz de 1998 y es obra de Manolo Santander junto a su chirigota 'La Familia Pepperoni'. Tuvieron que conformarse con un cuarto premio, pero el destino premio su obra dotándola de inmortalidad. Ligado al carnaval durante más de tres décadas, en 2012 fue reconocido con el 'Antifaz de Oro' y desde 2015 la obra luce impresa en los muros del estadio.
Nacido el 21 de noviembre de 1962, Manuel Santander Cachué pasó toda su vida muy cerca del Falla y fue un ilustre vecino del popular barrio de La Viña hasta su fallecimiento a los 56 años de edad el 3 de septiembre de 2019, víctima de un cáncer de pulmón. En el Carnaval de 2015, coincidiendo con un partido en casa, el presidente del Cádiz CF, Manuel Vizcaíno, le entregó una placa conmemorativa por la enorme repercusión de esa recordada copla que se ha convertido en todo un símbolo con el que todos los cadistas se sienten representados.
"Todo lo que nuestro presidente ha dicho es gracias al apoyo y aceptación de nuestros aficionados. Ellos son los que lo cantan y lo han hecho suyo, nosotros estamos muy contentos de todo eso haya pasado durante estos años", decía emocionado durante un acto en el entonces estadio Carranza, en cuya sala de trofeos hay un panel con la letra del 'Me han dicho que el amarillo' que le da categoría oficiosa a un legado imborrable para todo el pueblo gaditano.
Titulado 'Me han dicho que el amarillo...', dice así:
Me han dicho que el amarillo
Está maldito
Para los artistas
Y ese color, sin embargo,
Es gloria bendita
Para los cadistas
Y aunque reciban a cambio
Todo un calvario
De decepciones
De amarillo se pintan la cara
Amarillos son sus corazones
Han dado su vida y su garganta
Siguiendo a donde haga falta
Al Cádiz de sus amores
Ratatata ratatata
Bendito sean los que llenan de esperanza
Ratatata ratatata
Cada rincón
Cada escalón
De mi Carranza
Sin importarles que nunca
Vayan a ser campeones
Han conseguido el respeto
De toda España
Por esos colores
Por eso viva mi Cádiz
Vivan los cadistas
Vivan sus cojones