El Celta y un rompecabezas por resolver
La acumulación de futbolistas con contrato y sin sitio en los planes de Claudio Giráldez marca el inicio de una operación salida crucial para definir las incorporaciones del verano
El RC Celta inicia el mercado estival con un desafío recurrente: gestionar una plantilla sobredimensionada. Con hasta 32 jugadores bajo contrato, si consiguen que Ilaix Moriba y Borja Iglesias se queden, la prioridad del director de fútbol, Marco Garcés, será dar salida a los descartes y futbolistas cedidos que regresan al club sin hueco asegurado en el equipo de Claudio Giráldez.
Entre los casos más complicados están los de Carles Pérez, Unai Núñez y Joseph Aidoo, todos con salarios elevados y temporadas discretas en sus respectivos equipos de cesión. Pérez, que acabó sin protagonismo en el Getafe, tiene contrato hasta 2027 y un salario que dificulta su reubicación en LaLiga. La MLS aparece como una opción, aunque el jugador debería aceptar dejar el fútbol europeo.
Unai, por su parte, esta a la espera de la decisión del Athletic Club, que posee una opción de compra, mientras que Aidoo —con un año de contrato— está marcado por las secuelas físicas de su grave lesión en el tendón de Aquiles, lo que limita su mercado.
Manu Sánchez, que firmó un buen año en el Alavés, también regresa. Aunque su rendimiento ha sido destacado, el club vitoriano ha reconocido las dificultades económicas para ficharlo en propiedad. Su situación sigue abierta, pero cuenta con mercado y contrato con el Celta hasta 2028.
En el caso de Carlos Dotor, las opciones pasan por una nueva cesión en Segunda División o la rescisión de su contrato, mientras que Javi Rueda podría tener sitio en el primer equipo si no renueva Sergio Carreira. De lo contrario, su futuro también quedará en el aire.
Javi Rodríguez y Fer López tendrán ficha del primer equipo
A esta situación se suman los jóvenes Javi Rodríguez, Fer López y Yoel Lago, que ya tienen salario de primer equipo y, en el caso de los dos primeros, tendrán ficha profesional la próxima temporada. También está sobre la mesa la continuidad de Vicente Guaita y Carreira, así como el fichaje en propiedad de Ilaix Moriba y Borja Iglesias, prioritarios para el técnico.
El objetivo del Celta pasa por aligerar la plantilla hasta los 25 jugadores inscritos, con la intención de reforzarse además con un portero —que implicaría la salida de Iván Villar si sigue Guaita— y dos atacantes para suplir las marchas de Alfon e Iker Losada.
Con la operación salida como principal obstáculo, el Celta arranca un verano clave en el que el equilibrio entre salidas y llegadas marcará el futuro deportivo del club.