Otra compra que se esfuma para el Celta

El Celta de Vigo lleva tiempo trabajando en la compra de un algún club en Portugal. Un movimiento estratégico con el que los celestes buscan un doble objetivo tanto económico como deportivo. Para ello, la entidad gallega ya estuvo a punto de concretar en 2024 la adquisición del Paços Ferreira, mediante una copropiedad con el Independiente del Valle de Ecuador. Finalmente, la operación, que se iba a 10 millones de euros por el 80% de las acciones, no llegó a buen puerto, pero no ha sido el único intento realizado desde Balaídos, donde también se fijaron después en el Desportivo Chaves. No sería el último.

Este mismo verano se apuntó que el club vigués estaba cerca de nuevo de hacer realidad su deseo de desembarcar en el país vecino. El elegido era el Peñafiel, actualmente en la segunda división lusa. Pero ese nuevo intento se vio frustrado por la irrupción del presidente del Deportivo de La Coruña y de ABANCA, Juan Carlos Escotet, se hizo con el 90% del accionariado por un montante de 12 millones.

Tras ello, surgió la opción de hacerse con el control del Feirense, también en la Segunda Liga lusa. Una vez más se informó de que el Celta estaba próximo a un acuerdo para adquirir el 70% del capital social, propiedad del empresario nigeriano Kunle Soname, que maneja otro club de fútbol en su país y posee una de las empresa de apuestas más importantes en África.

Sin embargo, según ha informado el periodista Alberto Bravo en el podcast TQHT, la vía del Feirense también ha quedado descartada en las últimas horas. De este modo, la entidad que preside Marian Mouriño recibe un nuevo varapalo en sus pretensiones, pese a tener como aliado al magnate portugués Jorge Mendes, cuyos tentáculos se expanden ya por la cantera del Celta.

El Celta no comprometerá su economía

La intención del conjunto celeste es tener un equipo satélite en el país vecino que pueda servir como puente para canteranos o fichajes prometedores, permitiendo que estos se fogueen antes de dar el salto o puedan convertirse en fuente de negocio mediante traspasos a terceros clubes.

Ahora bien, tampoco se quiere realizar un inversión desmedida para cumplir con ese objetivo, de ahí que se buscase como aliado al Independiente del Valle. Al respecto, el CEO del club, José Gainzaraín, ya lo dejó bien claro: "No estamos buscando una participación mayoritaria ni un desembolso que ponga en peligro las arcas". Habrá que seguir buscando.