El plan secreto del Celta de Vigo

El equipo de Claudio Giráldez afronta una preparación ambiciosa con amistosos ante clubes de las principales ligas europeas

El plan secreto del Celta de Vigo
El plan secreto del Celta de Vigo - Cordon Press

La pretemporada del Celta de Vigo ya está en marcha, y lo hace bajo una consigna clara: máxima exigencia. Claudio Giráldez ha diseñado una hoja de ruta sin concesiones, apostando por rivales de alto nivel en los encuentros amistosos para preparar a fondo al equipo antes del arranque oficial de la temporada. La elección de los contrincantes no deja lugar a dudas: el Celta de Vigo se medirá a conjuntos competitivos de Portugal, Alemania, Suiza e Inglaterra, en una gira que refleja el salto de ambición del club.

El primer test para el nuevo Celta de Vigo de Giráldez será este martes en Afouteza frente al Famalicao, séptimo clasificado de la Liga Sagres la temporada pasada. El conjunto portugués, dirigido por Hugo Oliveira —exasistente de Marco Silva en el Fulham—, se presenta como una buena primera piedra de toque para medir el estado físico y táctico de los celestes tras los primeros entrenamientos.

El siguiente compromiso llevará al Celta de Vigo hasta Braga. En el Estadio Municipal se enfrentará el sábado al Sporting de Braga, que completó una excelente campaña con 66 puntos y un meritorio cuarto puesto en la liga portuguesa. El club ha apostado por Carlos Vicens como nuevo técnico. El español llega tras cuatro temporadas como asistente de Pep Guardiola en el Manchester City, lo que añade atractivo a un duelo de alto voltaje.

Amistosos internacionales para preparar al EuroCelta

La preparación del Celta de Vigo continuará el 26 de julio con un viaje a Alemania para enfrentarse al VfB Stuttgart, noveno clasificado de la Bundesliga. El equipo alemán se quedó a tan solo dos puntos del Mainz 05, que ocupó la última plaza europea vía Conference League. Este partido ofrecerá a Giráldez una prueba exigente contra un rival de ritmo alto y físico potente, en un contexto perfecto para evaluar la adaptación de su plantilla a desafíos continentales.

Solo tres días después, el 29 de julio, el Celta de Vigo se desplazará a Suiza para jugar contra el Grasshopper de Zúrich en el GC Campus de Niederhasli. El conjunto suizo logró evitar el descenso en un dramático play-out, lo que promete un choque de intensidad entre equipos que buscan afinar sus sistemas en plena pretemporada.

Ya en agosto, el Celta de Vigo volverá a tierras portuguesas para medirse al Vitoria de Guimaraes en el estadio Dom Afonso Henriques. El Guimaraes terminó sexto en la pasada edición de la Liga Sagres con 54 puntos, a solo tres del quinto clasificado. Bajo la dirección del recién llegado Luis Pinto —que ascendió al Tondela la pasada campaña—, los portugueses serán otro rival competitivo para los vigueses.

La última cita, y una de las más esperadas, será el 9 de agosto en Inglaterra. El Celta de Vigo visitará el Molineux Stadium para enfrentarse al Wolverhampton, equipo en el que militan Fer López y Strand Larsen. Será un partido cargado de morbo y de emociones, además de una prueba de máxima exigencia contra un equipo que logró evitar el descenso en la recta final de la Premier League.

Con esta preparación, Claudio Giráldez busca que su Celta de Vigo llegue en las mejores condiciones posibles al inicio de la competición oficial. Sin amistosos de trámite ni rivales menores, la apuesta del club celeste es clara: afrontar cada partido como si fuera oficial, con el objetivo de consolidar el proyecto del EuroCelta desde el primer minuto.