Palma del Río 1-7 Real Betis: Pablo García se estrena en la fiesta cordobesa

El Real Betis no pasó apuros en Palma del Río. En la que fue una auténtica fiesta del fútbol, con unas gradas absolutamente llenas en el Estadio Sergio León, los dobletes de Pablo y Rodrigo Riquelme, junto a los goles de Sergi Altimira, Diego Llorente y Abde, fueron suficientes para poder pasar a la Segunda Ronda de la Copa del Rey. A pesar de la entidad de rival, no se puede decir que se lo pusiesen muy sencillo al equipo de Manuel Pellegrini, con un Sergio León protagonista en todas las fases del juego local. Esto acabó provocando que consiguiesen el tanto de la consolación, desatando una fiesta absoluta en el estadio cordobés. Con el estreno de Pablo García como goleador oficial, el conjunto de Manuel Pellegrini empezó con buen pie su andadura en la Copa del Rey y pudo sellar su billete a la próxima ronda.

Una fiesta en Palma que el Real Betis no aguó

En estas primeras rondas de Copa del Rey, si hay algo claro es que la ilusión no se pierde. Los aficionados locales estuvieron totalmente volcados con su equipo, transmitiendo garra y coraje en las primeras jugadas donde prácticamente los cordobeses tocaban el balón. Con todos estos alicientes, y un campo que era una auténtica fiesta, las más claras las empezó teniendo el Real Betis. La primera llegó por parte de Marc Roca, con un Germán que no tuvo problemas en atajar esa pelota. El dominio era evidente, pero no era un vendaval. Un hecho que empezó a crear esperanza en los locales, aunque estas se desvanecieron algo con el primer tanto del equipo visitante. Ángel Ortiz recibía desde su costado y, con el primer control, le sirvió para poder zafarse de su marca. Una vez hecho esto, le puso el balón a Pablo García, que apenas tuvo que filtrar el balón al área pequeña para encontrar como aliado a Rodrigo Riquelme y hacer el primero. Júbilo en las gradas del Estadio Sergio León, todo ello provocado por la gran cantidad de béticos en las gradas.

Lo que podía hacer pensar que iba a provocar una decaída en el equipo local, pues empezó a pasar todo lo contrario. Dos ocasiones del equipo cordobés empezaron a animar el asunto, siendo Sergio León uno de los protagonistas de las mismas. Se puede decir que se cumplió uno de los objetivos, como fue el poner en aprietos a Adrián San Miguel, haciendo que esta visita no fuese tan halagüeña de la esperada. Con los clásicos "sí se puede" y "a por ellos", empezó a vivirse otro tipo de ambiente en la localidad cordobesa, ya que se estaba viendo posible hincarle el diente al equipo de Manuel Pellegrini. Aunque, como en muchas ocasiones se suele repetir, en estos tipos de partidos dos destellos te pueden condenar. Y al Real Betis no le hizo falta mucho más para anotar el segundo. Sergi Altimira se encontró el balón en el área y, ante un Germán completamente inmóvil, consiguió vencerlo sin mayor problema y poder poner el segundo en el electrónico. Este tanto sí se puede decir que supuso un mayor jarro de agua fría, con una afición que empezó a ver como esa ilusión generada empezó, en cierta manera, a desvanecerse.

Y, con este guion, empezaron a sobresalir las cualidades béticas. Con un Pablo García que empezaba a ser el principal foco ofensivo, desde su banda se intentaba atacar al lateral y poder conectar con las otras piezas. Y, casi como si de un adelanto se tratase, el extremo del Parque Alcosa consiguió empalar un gran disparo y anotar su primer tanto oficial. Gran alegría del canterano verdiblanco, que se besaba el brazo sabedor del logro que acababa de conseguir, como era estrenarse de forma oficial con el equipo de su vida. No se puede decir que haya poca expectación con él, con un beticismo que confía en empezar a ver muchos tantos suyos. Y, aunque parecía resistirle, en el Estadio Sergio León llegó su ocasión. Tras ese tanto, empezó a estabilizarse algo más el encuentro, incluso con algún acercamiento peligroso local que empezaron a generar cierto runrún en el estadio. La fiesta, aún así, era tremenda. Ya lo dijo Sergio León en la previa que el objetivo era que se sintiesen profesionales por un día. Y, al descanso, la ventaja por tres goles en el Real Betis generó exactamente ese propósito.

La ilusión se volcó en Palma

Los segundos cuarenta y cinco minutos empezaron siendo un gran dominio del equipo sevillano. El suflé, en cierta manera, pareció haberse bajado y esto lo aprovecharon los de Manuel Pellegrini para generar peligro sobre la meta defendida por Germán. Con un ambiente algo más relajado, también provocado por la reciente vuelta de vestuarios, el canterano volvió a ser el protagonista de un nuevo tanto. En un gran pase filtrado de Ángel Ortiz, los de la casa volvieron a conectar para poner el cuarto en el electrónico. Gran partido de ambos, que estaban haciendo de ese costado un auténtico quebradero de cabeza para la defensa local. Todo parecía seguir en el guion previsto, con un dominio que estaba siendo evidente. Aunque, con la relajación y los cambios, poco a poco volvieron a florecer las ilusiones en el equipo de Sergio León, que empezó a ver la puerta de Adrián San Miguel con algo más de cercanía. Y, tras varios avisos, todo acabó desbordando en el estadio cordobés.

En una jugada florecida en el costado derecho verdiblanco, el protagonista de la noche, Sergio León, recibía el cuero. Con una pequeña vista adelante, vio a un recién entrado Manuel sin oposición alguna. Y, tras ponerle el balón, todo acabó estallando de júbilo en Palma del Río. El gol de Manuel generó una tremenda alegría y estallido de la afición, que veían como habían sido capaces de hincarle el diente a uno de los equipos más grandes del fútbol español. La energía era evidente, y empezaron a florecer los típicos sonidos de ánimos que incitaban a ir en busca de algo más de botín. De hecho, ese gol pareció aupar al Atlético, que empezó a encadenar llegadas con un Sergio León que solía ser el protagonista de todas ellas. Sin embargo, la diferencia siempre se acababa haciendo visible, aunque la ilusión permanecía intacta.

A pesar de todo esto, acabó sucediendo lo que era casi previsible. En un saque de esquina, y tras aprovechar un rechace, Diego Llorente apenas tuvo que poner el pie para anotar el quinto del equipo verdiblanco. De esta manera, se acabaron un poco las ilusiones del cuadro cordobés, que empezó a ver como los de Manuel Pellegrini empezaban las acometidas más peligrosas sobre su meta. Sin embargo, tanto Germán como la fortuna, empezaron a alinearse del lado cordobés para evitar que el resultado fuese algo mayor. Sin embargo, este último no le acabó acompañando en los minutos finales, cuando vio como Rodrigo Riquelme aprovechó un segundo rebote a parada de Germán para poner el sexto gol en el marcador. El gol posterior de Abde sirvió para refrendar la victoria y el dominio bético, en lo que fue una auténtica fiesta del fútbol más pasional.

Ficha técnica

Atlético Palma del Río: Germán; Abraham, Francisco de Paula, Rafael, Mateo (Manuel Rodríguez 54'); Francisco Cano (José Carlos 61'), José Ángel, Francisco Rodríguez (Marcos Soler 54'); Ignacio Amo, Pedro (Manuel Pablo 61') y Sergio León (Fran Arjona 75').

Real Betis: Adrián; Ángel Ortiz (Bladi 88'), Valentín Gómez, Diego Llorente (Marc Bartra 75'), Aitor Ruibal; Marc Roca (Corralejo 75'), Chimy Ávila, Sergi Altimira; Pablo García, Rodrigo Riquelme y Bakambu (Abde 70').

Goles: 0-1 (7') Rodrigo Riquelme; 0-2 (26') Sergi Altimira; 0-3 (34') Pablo García; 0-4 (51') Pablo García; 1-4 (62') Manuel Rodríguez; 1-5 (73') Diego Llorente; 1-6 (84') Rodrigo Riquelme; 1-7 (89') Abde

Árbitros: José Luis Guzmán (Colegio Andaluz) dirigió el encuentro en el césped. En esta ronda, no hay presencia de VAR.

Incidencias: Partido correspondiente a la Primera Ronda de la Copa del Rey celebrándose en el Estadio Sergio León con la presencia de 8878 espectadores.