Se confirma la hecatombe económica del Eibar

El Eibar profundiza su déficit y cerró la temporada 23/24 con más de ocho millones en pérdidas

Se confirma la hecatombe económica del Eibar
Afición del Eibar en un desplazamiento - Cordon Press
Jesús GalianoJesús Galiano4 min lectura

El conjunto armero, que compite en LaLiga Hypermotion, concluyó la campaña 2023-2024 con un déficit de 8,36 millones de euros, una cifra muy similar a la del ejercicio anterior, cuando el saldo negativo alcanzó los 8,66 millones.

El Eibar sigue sin lograr estabilidad financiera. La entidad presidida por Amaia Gorostiza mantiene una tendencia similar a la de los últimos años en términos económicos, sin grandes variaciones en sus ingresos operativos, que se situaron en 10,09 millones de euros, apenas un 2,04% más que en la temporada 2022-2023. Los gastos en personal también se mantuvieron sin cambios significativos, con una inversión de 13,5 millones en cada uno de los dos últimos cursos.

Disminución en los ingresos audiovisuales y crecimiento en publicidad

La venta de derechos de retransmisión generó 6,77 millones de euros para el club, lo que supone un descenso del 6,74% respecto a la temporada anterior. En contraste, los ingresos procedentes de patrocinios y publicidad experimentaron un notable incremento del 41,66%, pasando de 1,2 millones en 2022-2023 a 1,73 millones en la última campaña. También se produjo un ligero repunte en los ingresos por rendimiento deportivo, que subieron de 1,39 a 1,58 millones de euros.

En cuanto a la recaudación por abonados y socios, el club ingresó poco más de un millón de euros. A esto se suman los 336.000 euros percibidos por parte de LaLiga y los 152.000 euros generados en concepto de competición. Además, los contratos de patrocinio vigentes durante el último curso aportaron una suma de 1,33 millones de euros, lo que representa un incremento del 62,5% respecto al ejercicio previo.

Ajustes en la masa salarial y traspasos con menor impacto

Aunque el gasto se mantuvo en 13,5 millones de euros, la inversión en la plantilla deportiva se redujo un 8%, pasando de 10,09 millones en 2022-2023 a 9,21 millones al cierre del último ejercicio. En sus cuentas, el club explica que cuatro jugadores del primer equipo fueron cedidos a otras entidades, mientras que el Eibar también incorporó a seis futbolistas en calidad de préstamo.

Otro aspecto que presentó una variación significativa fue el capítulo de ingresos por ventas de jugadores. En 2023-2024, las ganancias por traspasos se redujeron a 136.000 euros, muy lejos de los 2,33 millones registrados el año anterior.

Durante la campaña 2022-2023, el club traspasó a Edu Expósito al Espanyol por 4,5 millones de euros, mientras que las incorporaciones de Matheus Pereira y Juan Carlos Arana costaron menos de dos millones en total. En la última temporada, el único buen movimiento de salida fue la venta de Óscar Sielva al Huesca por 200.000 euros, mientras que el fichaje más costoso fue el de Cristian Gutiérrez, por quien el Eibar desembolsó algo más de medio millón de euros al Málaga.

Aprobación al 'Plan Impulso' y aumento del pasivo

El Eibar se sumó al 'Plan Impulso' de LaLiga, a través del cual recibirá 68,36 millones de euros. Sin embargo, esto ha supuesto un incremento en su pasivo a largo plazo, que alcanzó los 39,63 millones de euros en 2023-2024. Además, el club cuenta con 1,7 millones de euros en deudas a corto plazo derivadas del acuerdo de financiación con CVC.

Según reflejan sus cuentas anuales, el club firmó el 30 de noviembre de 2021 su adhesión a este plan de financiación, destinando 47,85 millones a infraestructuras, 10,25 millones al límite salarial de la plantilla y otros 10,25 millones a la reducción de deuda.