Antonio José Medina4 min lecturaLos controles antidoping son algo de lo que apenas se habla más allá de que le toque a una estrella o de que pase algo inesperado. El caso de lo primero se pudo vivir en el Argentina-Australia, cuando no se vio a Leo Messi en las celebraciones y luego se aclaró que había tenido que ir a pasar el control tras el partido. Y lo segundo, en la vergonzosa burla del marroquí Amallah tras encontrarse a Marcos Llorente en el control tras eliminar a España en los penaltis y decidir mofarse de él y publicarlo en redes sociales.
Sin embargo, la organización del Mundial de Qatar 2022 y la FIFA han querido presentar un informe, como ya hicieron con los datos estadísticos de primera fase mundialista, y han hecho públicos todos los datos de los controles pasados durante la cita mundialista y a lo largo de las fases de clasificación previas.
Entre ellas hay datos muy curiosos. Lógicamente, conforme más se avanza en un Mundial, lógicamente, los futbolistas que siguen adelante pasan más test, tanto en partidos como en las concentraciones, y según anuncia la FIFA, de media, cada jugador de las cuatro selecciones que siguen optando al título y están en las semifinales de Qatar 2022 ha sido controlado en 4.6 ocasiones desde enero. E, incluso, algunos de ellos se han sometido hasta a 10 pruebas en este tiempo.
Durante estas tres semanas en las que se ha jugado la Copa del Mundo se han pasado un total de 2.846 test antidoping, el 78 % de los cuales se realizaron fuera de competición, y el 22 % restante, en competición.
En cuanto a esta última, en los 60 partidos que se han jugado antes de las semifinales, la FIFA ha hecho 369 pruebas, con 941 muestras. Y han pasado pruebas todos los futbolistas participantes en el torneo al menos una vez durante los meses previos a la competición.
Antes de que empezara el Mundial, en los torneos clasificatorios para Qatar 2022, se han realizado 244 pruebas, pues en cada partido se controlaba al menos a dos jugadores por equipo.
Todos estos datos han dejado cinco positivos, todos ellos en las rondas previas al Mundial. Tres han sido de la CONCACAF y dos de la Confederación Africana. Estos son los cinco jugadores que dieron positivo y que, por tanto, fueron sancionados:
Erick Alejandro Rivera, de El Salvador. Dio positivo por clostebol tras un encuentro disputado el 8 de septiembre de 2021. Está suspendido hasta el 5 de octubre de 2025 (cuatro años).
Sabri Ali Mohamed, de Yibuti. Dio positivo por testosterona tras un encuentro jugado el 12 de noviembre de 2021. No podrá volver hasta el 11 de enero de 2026 (cuatro años).
Sylvain Gbohouo, de Costa de Marfil. Dio positivo por trimetazidina tras jugar el 16 de noviembre de 2021. Estuvo suspendido hasta el 23 de mayo de 2022, durante 18 meses.
Wisdom Niayitey Quaye July, de Honduras. Positivo por clostebol tras un choque disputado el 2 de febrero de 2022. Volverá el 1 de agosto del próximo año tras 18 meses de sanción.
Orlando Moisés Galo Calderón, de Costa Rica. Positivo por clostebol el 21 de septiembre de 2022 en un control fuera de competición. Ha sido suspendido provisionalmente desde el 19 de octubre de este año, aunque su caso se va a revisar más exhaustivamente.