Problemón en el Racing de Santander

El Racing de Santander está viviendo un buen inicio en LaLiga Hypermotion pero no todo es bonito y eso se debe a que a pesar de ser el líder en el último partido y también un poco en los anteriores se ha visto como la defensa no es precisamente el fuerte del equipo, cosa que está pasándole factura en forma de goles encajados y culminó este fin de semana pasado con el hasta ahora colista de la competición, La Cultural Leonesa.

El club santanderino está viviendo una situación llamativa en el inicio de la competición en la división y se trata de un equipo que ha encajado una buena cantidad de goles pero sin embargo manda en la categoría y eso se debe al talento que tiene arriba en un ataque conformado por Andrés Martín, Asier Villalibre e Íñigo Vicente entre otros, sin embargo da la sensación de que a veces este equipo está partido por la mitad con una defensa bastante mejorable.

Líder pero con una tarea pendiente

Diez goles empatados en cinco partidos de Liga. Insólito para un equipo que, aun así, es el líder de Segunda División. Esta es la cara y la cruz de un Racing expeditivo en ataque y con una tremenda pegada, pero que se desangra en la defensa. Así pues, como tarea pendiente del equipo cántabro queda mejorar en esta faceta ya que tanto desequilibrio entre las líneas no suele traer resultados ya que puede provocar una racha irregular de resultados, de momento son pocas las quejas que puede haber referente al equipo que domina la competición pero es evidente que las carencias asomaron en el pasado encuentro.

A día de hoy la seña de identidad del equipo dirigido por José Alberto es la de un equipo ofensivo es que se preocupa más en hacer goles que no mediar del todo en cuanto se recibe Pero el técnico es al mismo tiempo consciente de que es extremadamente complicado mantener un ritmo de ascenso encajando una media de dos goles por partido. Pese a tener a dos de los tres máximos goleadores de la categoría, Andrés y Villalibre, líderes de la competición con cuatro tanto empatados con otros cuatro de Zakaria tras su hat trick frente al Mirandés.

El problema es que mantener este nivel goleador es algo verdaderamente complicado ya que en algunos de ellos, dentro del equipo fue necesario marcar hasta tres goles para sumar la victoria, ejemplo de ello fueron los duelos frente al Almería y frente al Albacete. Así pues resulta llamativo y preocupante a la larga que el equipo haya encajado en todas las jornadas, un condicionante que pone en riesgo el liderato si el problema persiste.