Accidentado debut en la 24/25... y primer 'charco' que pisa Diego Hormigo

Acaba de cumplir 22 años, de los cuales ha pasado la mayoría en la cantera del Sevilla FC. Lateral izquierdo, pero también lo que haga falta en las categorías inferiores y en el Sevilla Atlético, donde ha sido (con holgura y rendimiento, además) extremo, central (sin importar su 1,82), mediocentro creativo, pivote defensivo... Se estrenó con los mayores cuando tenía 20 en un partido de LaLiga 22/23 ante la Real Sociedad. Otro ratito la campaña pasada ante el Rayo Vallecano y, tras una larga espera, Joaquín Caparrós le dio la titularidad este jueves en Pamplona en su segunda revolución consecutiva, sin contar durante los mismos partidos, aunque su reestreno fue accidentado. De esta forma, fue el elegido para salir cuando Dodi Lukébakio fue expulsado a los 38 minutos para que Álvaro García Pascual ejerciera de islote... unas horas antes de que el zurdo, que termina este año y todavía no ha renovado, se metiera en su primer 'charco' importante.

Y es que las redes sociales cargaron contra él tras emitir 'Zona Mixta' un vídeo de la llegada de la expedición nervionense de vuelta a la capital hispalense ya en la madrugada del viernes. En las imágenes se ve a Hormigo pidiendo al periodista que las grababa, nuestro antiguo compañero en ESTADIO Deportivo Mario Míjenz, que dejara de hacerlo. Encontrarse junto al presidente sevillista, José María del Nido Carrasco, supuso la gota que colmó el vaso de la paciencia de algunos, que censuraron su gesto. El canterano dio algunas explicaciones por privado, aunque ha terminado publicando un comunicado en el que trata de defenderse y, sobre todo, aplacar los ánimos de la afición blanquirroja, que recibió a jugadores, técnicos y directivos con insultos y hostilidad, siendo Caparrós de los pocos que se salvó de la quema entre los gritos que pedían más actitud a los profesionales y el adiós de los que mandan.

"Ante las imágenes del aeropuerto que salieron anoche, quiero aclarar que en ningún momento quiero entrometerme en las quejas de los aficionados allí desplazados. Fue una acción rápida en la que pido al periodista que por favor no grabase más esa situación tensa pero totalmente comprensible. Nadie más que yo y mi familia sabemos lo que siento por este club y lo que significa para mí, porque, al igual que tengo la suerte de juga,r también he sido aficionado desde pequeñito. Siempre he querido y quiero lo mejor para este escudo y esta afición, ya que los jugadores vamos y venimos, pero ellos siempre están. Espero que se haya aclarado la situación y luchemos todos por el mismo objetivo. Viva el Sevilla FC", escribía esta tarde en sus redes sociales Diego, deseoso de pasar página y de que no paguen con él algunos su frustración y su malestar.