Akor Adams y la fuerza del destino: estrella del Sevilla FC y de Nigeria "gracias a Dios y a Victor Osimhen"

El delantero africano, que este jueves ha sido noticia por su inesperada ausencia en el penúltimo entrenamiento sevillista antes de recibir al Mallorca, se ha convertido en el protagonista de una historia viral con un guion digno de película y con el ariete del Galatasaray como 'partenaire'

El delantero nigeriano Akor Adams se ha convertido este jueves en el protagonista en la actualidad informativa del Sevilla FC, ya que de manera inesperada no se ha dejado en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios en el entrenamiento matinal en el que Matías Almeyda ha recuperado ya a seis de sus siete internacionales. A todos menos a él. No cabe, sin embargo, el motivo de preocupación. El jugador de 25 años ha sufrido un pequeño retraso en su viaje desde su país tras debutar a lo grande con la absoluta de las 'Súper Águilas' y llegará un poco más tarde a la capital andaluza. Su idea es ejercitarse suavemente de manera individual y el único hándicap es que sólo tendrá un entrenamiento con el grupo antes del encuentro liguero del sábado ante el RCD Mallorca, donde confía en alargar su racha de dos jornadas seguidas marcando -ambas saliendo desde el banquillo- aderezada con su primera diana con la camiseta de su país.

Akor Adams triunfa en el Sevilla FC y en Nigeria gracias a Dios... y a Victor Osimhen

Es la fuerza de destino, que por fin empuja a favor. Akor Adams comienza por fin a recoger los frutos de su esfuerzo. Lo que mucho ha sufrido desde su llegada a Europa con sólo 19 años, eso sólo lo sabe él. Algo ha trascendido de lo mal que lo pasó en el vestuario del Montpellier francés y él mismo ha deslizado en alguna ocasión lo complicado que le resultó adaptarse a Noruega, donde militó en el Sogndal (2019-2022) y en el Lillestrom (2022/2023), pero la enseñanza que queda de todo esos nubarrones es su enorme capacidad de lucha contra el sufrimiento y su habilidad para encontrar siempre la manera de inspirarse y motivarse.

Sólo hace falta seguirle en redes sociales para ver lo importante que ha sido su fuerte devoción cristiana en esa fortaleza mental que a menudo ha tenido que reconstruir, pero también se ha apoyado mucho en referentes futbolísticos y uno es Victor Osimhen, aunque sólo tenga un año más que él. La casualidad (o esa fuerza del destino) ha querido que el 'alumno' saliese del banquillo y marcase su primer gol con Nigeria (el 1-2 en Lesoto) a pase del 'profesor', quien en el segundo partido de esta ventana se salió con un 'hat-trick' en una cita ante Benin (4-0) en la que el sevillista se estrenaba como titular compartiendo dupla atacante con el hoy futbolista del Galatasaray y en la que su selección logró meterse en el 'play-off' de repesca para el Mundial 2026. Mejor guion, imposible.

La historia de película de Akor Adams con Osimhen como secundario de lujo

Algunos guiones de la vida están escritos a mano por el mismo Dios! ¡¡¡Gracias, Osimhen, estoy viviendo un sueño!!!", escribe Akor Adams con imágenes de abrazo entre ambos tras el gol del nervionense a Lesoto y comparte una captura de mensaje privado de Instagram que le envió a su asistente para preguntarle cómo hacía para motivarse "en los días malos" y darlo todo en los entrenamientos y en los partidos.

La respuesta se le quedó grabada a fuego: "Oye, hermano, siempre habrá días malos, ya sea en un partido o en un entrenamiento, lo que tienes que mantener es tu calidad y, lo más importante, la voluntad de ganar, el deseo de triunfar, las ganas de alcanzar tu máximo potencial, que es básicamente lo que te hace destacar. Intenta olvidar rápidamente los días malos, ¿vale? He recibido muchas críticas muy duras, pero he decidido no dejar que eso me desanime. Sólo hay que poner a Dios en primer lugar y creer en uno mismo. Los días malos sólo te harán más fuerte".

La historia compartida por el propio Akor Adams ha tenido una repercusión viral llena de asombro por este cinematográfico relato. En aquellos oscuros días de 2019, en el inicio del arduo proceso de aclimatación al fútbol noruego, el fornido ariete sevillista se atrevió a mandarle un mensaje a su compatriota Osimhen, que por aquellos entonces acababa de despuntar en Europa por su capacidad goleadora demostrada en el Charleroi SC y en el LOSC Lille francés. Los belgas le ficharon del VfL Wolfsburgo por los 3,5 millones de la opción de compra de su cesión y le vendieron por 22,4 millones a los galos, que un año después recaudaron 79 millones con su traspaso al SSC Napoli, donde también se salió. Este pasado verano, el Galatasaray le ha fichado por 75 kilos.