Caos con Víctor Orta en el Sevilla
ESTADIO ha podido constatar por fuentes internas que en el club ya no se confía en su trabajo y que la idea es que no continúe, pero nadie le ha comunicado nada a día de hoy, por dos factores, y trabaja con normalidad en la planificación
Ahora mismo en el seno de Nervión reina completamente la incertidumbre con respecto a la planficación para la próxima temporada, pues las decisiones tomadas no se concretan en hechos condicionadas por el freno económico y la ausencia de liderazgo para concretar lo que realmemte se desea.
Es lo que ocurre, precisamente, en uno de los frentes más importantes y urgentes por resolver, si Víctor Orta continuará o no en la dirección deportiva nervionense. Asunto en el que lo que transmite la entidad de puertas para afuera, a intermediarios, agentes o personas de confianza, no se corresponde con las comunicaciones intermas o, mejor dicho, la falta de ella.
En este sentido, ESTADIO Deportivo ha podido constatar a través de fuentes internas que en la planta noble se ha perdido completamente la confiajnza en el trabajo de Víctor Orta y que la intención es que no continue, pero lo cierto es que, a la hora de la verdad, nadie le ha comunicado directamente al director deportivo madrileño que su etapa en Nervión ha llegado a su fin.
De ese modo, Orta trabaja con completa normalidad a pesar de que es consciente de lo que se barrunta entre bambalinas en el club, pero su obligación, mientras no haya comunicación oficial, es construir el nuevo proyecto para la 25/26, porque no hay tiempo que perder al respecto, con la llegada de nuevo entrenador como prioridad.
Y es que hay dos factores que han frenado hasta ahora la destitución de Víctor Orta, ambos marcados por la estrechez económica del club. Por un lado, al director deportivo le queda un año de contrato por delante, porque lo habría que alcanzar un acuerdo y realizar un desembolso económico para su marcha, y por otro que están encontrando muchas dificultades para encontrar a un sustituto de garantías, tanto por el tema monetario como por las faltas de garantías que se ofrecen en la entidad blanquirroja. Así, como adelantó ESTADIO Deportivo, el preferido es Braulio Vázquez, con contrato en vigor con Osasuna hasta 2026, por lo que su llegada exige negociación con Osasuna.
No obstante, primero habría que convencer al propio director deportivo, que ya en 2023 se le tanteó y por entonces, pese a que la situación era mucho mejor en lo deportivo y en lo económico, no lo vio del todo claro y prefirió quedarse en El Sadar. Ahora se le presentaría de nuevo la posibilidad, pero, a día de hoy, Víctor Orta sigue al frente sin que nadie le haya dicho lo contrario, sin descartar que continúe una campaña más.