Fernando Mateos5 min lecturaLa goleada endosada el pasado sábado al Valladolid ha permitido al Sevilla FC respirar tranquilo y espantar de nuevo los fantasmas que revoloteaban sobre Nervión. El descenso ha quedado a 8 puntos y se ha revitalizado el sueño de pelear incluso por los puestos europeos, pues hasta el octavo podría jugar la Conference League si, como parece, España se lleva una plaza extra para la Champions. Pero más allá de la situación clasificatoria, el triunfo en Pucela ha servido para relajar también la tensión generada entre Xavi García Pimienta y el club, con Del Nido Carrasco a la cabeza, tras las quejas públicas del entrenador por contar con una plantilla "muy corta" tras los movimientos invernales.
Pese a ello, no hay que descartar que se produzca una nueva salida en este mes de febrero. Pero en este caso, no parece que ninguna de las partes vaya a molestarse por ello. Al contrario, en el seno de la entidad de Eduardo Dato estarían encantados de colocar a Marcao, algo que llevan intentando sin éxito desde el pasado verano, abriéndose ahora una nueva posibilidad que tiene como límite el próximo día 28, fecha en la que cerrará el mercado de fichajes en Brasil.
Según informa ABC, sus agentes están moviendo al central en su país, donde el pasado mes ya hubo dos clubes interesados en sus servicios. Pero el de Londrina rechazó tanto al Gremio de Porto Alegre, cuya propuesta económica no le convencía, como al Flamengo. Además, también dijo 'no' a otras propuestas de clubes europeos (sobre todo de Turquía y Rusia), así como a varios ofrecimientos que le llegaron desde México y Arabia Saudí. Pero los últimos acontecimientos le han llevado a cambiar de opinión y ahora no descartaría cambiar de aires si se presenta una buena oportunidad.
Tras dos campañas marcadas por las lesiones, en las que sólo pudo jugar 21 partidos, el ex del Galatasaray apenas ha tenido ningún contratiempo físico este curso. De hecho, comenzó entrando en los planes del técnico catalán y participó en siete de las diez primeras jornadas de LaLiga, cuatro de ellas como titular, perdiéndose un choque por sanción y otro por una fractura nasal. Pero desde que partió en el once ante la Real Sociedad el 3 de noviembre, cometiendo un absurdo penalti sobre Zubimendi, sólo ha participado en tres encuentros ligueros de forma testimonial, sumando entre ellos apenas cinco minutos, amén de participar en los tres duelos disputados en la Copa del Rey.
Sus errores han hecho que García Pimienta deje de contar con él y ni siquiera la lesión de Nianzou ha aumentado sus opciones de jugar. Es más, tras ganarse una amarilla ante el FC Barcelona al poco de salir, este pasado sábado se quedó en el banquillo mientras el técnico catalán apostaba por el canterano Ramón Martínez para dar aire al equipo en el eje de la zaga. Un significativo cambio que resultó un mensaje en toda regla y podría empujar a Marcao a hacer al fin las maletas.
Nadie pondría pegas a su salida pese a disponer del plantel más corto de LaLiga, pues se confía en Badé, Gudelj y Kike Salas más la aportación del filial para cubrir los dos puestos de centrales. Además, la idea es que se pueda concretar una cesión hasta diciembre, lo que supondría un importante ahorro debido a su alto salario y daría aire a la planificación de cara al próximo verano, aunque aún queda un buen pellizco por amortizar de su fichaje: costó 13 millones de euros (más dos en variables) y firmó hasta 2027.