El Rayo no quiere empezar perdiendo en la grada

Más de 2.000 aficionados a acompañado al Sevilla FC hasta la fecha en sus tres salidas ligueras de 2025. De esta forma, alrededor del millar acompañó a los de García Pimienta al Coliseum de Getafe, mientras que 500 estuvieron presentes en Montilivi y unos 600 se personaron el pasado fin de semana en el Nuevo José Zorrilla de Valladolid. Los blanquirrojos sumaron siete puntos de nueve posibles en esas citas, pero el asalto a Vallecas de principios de marzo tendrá que ser con un respaldo casi testimonial. Así lo denuncia el club nervionense: "El Sevilla FC no contará con el número mínimo de entradas habitual en los encuentros a domicilio y, por lo tanto no realizará sorteo para las mismas. El Rayo sólo cederá 143 localidades, que el club distribuirá entre los colectivos que habitualmente se desplazan (..). El club ha solicitado al Rayo Vallecano un número superior de entradas para poder distribuirlas entre sus aficionados, pero el club madrileño no ha atendido tal petición", reza el comunicado.

Lo cierto es que en la campaña anterior, con un doblete de Youssef En-Nesyri, recién retornado de la Copa de África para formar una dupla letal con Isaac Romero, el cuadro hispalense se impuso allí por 1-2 y se vio arropado por más del triple de seguidores que los que le acompañarán esta vez, pese a que el recinto de la calle Payaso Fofó, con un aforo idéntico al del campo del Girona FC (algo más de 14.500 espectadores), no ha seguido el protocolo de reservar un cupo mínimo de plazas para la hinchada rival (al precio pactado de 30 euros), pues, mientras la entidad catalana ofreció medio millar, su homóloga franjirroja se ha quedado en su mínima expresión. Desde luego, la institución presidida por Raúl Martín Presa, consciente del tirón de los equipos sevillanos en la capital del país, con varias peñas en los alrededores, no ha querido comenzar perdiendo ya en las gradas.

Hasta hace una década, los Rayo-Sevilla sí eran declarados de Alto Riesgo por el Comité Antiviolencia, aunque no por posibles enfrentamientos entre los ultras de ambos equipos, de ideología similar, sino por el hecho de que los Biris y los Bukaneros aprovechaban estas citas para hacer causa común contra el Frente Atlético, los radicales del Atlético de Madrid, que sí son de ultraderecha. Ni siquiera existe ahora esa coartada ni alguna otra limitación para que hubiese un desplazamiento masivo de sevillistas a Vallecas, sino simplemente una medida unilateral tomada por la directiva rayista, que entiende que podrá ocupar casi todo su estadio ante un rival al alza como el nervionense.