Antonio José Medina4 min lectura“Al principio se habló con algunos equipos, pero, con mi representante, no sentía que era el momento para ir a decirle a Monchi que necesito salir. No quise insistir porque no lo sentía. Por la situación donde estábamos no sentía salir en un momento así", señala Yassine Bono hace unos días en una entrevista concedida a PTV Sevilla. El portero marroquí del equipo nervionense está en el punto de mira de algunos de los clubes más poderosos, económicamente hablando, del mundo.
Ya era seguido por sus temporadas anteriores e incluso antes de ganar el Trofeo Zamora la pasada temporada, pues las diferentes clasificaciones, entre ellas el Balón de Oro, lo situaban entre los diez mejores porteros del mundo. Pero el Mundial de Qatar 2022 le ha lanzado y le ha situado en el podio, al lado de los más grandes.
Por eso parece difícil que el Sevilla FC lo pueda retener. El portero marroquí ha demostrado un gran compromiso con el equipo de Nervión en todo momento. Aceptó elevar su cláusula de rescisión el pasado año, no presionar en el mercado invernal cuando podía ir a un club de mayor potencial y en que su ficha fuera mayor... Y se ha quedado a defender el escudo en una situación complicada.
Además, es el mayor valor que el Sevilla tiene ahora mismo y, dado el nombre de sus pretendientes, el jugador por el que más podrían sacar el próximo verano, en el que la plantilla sevillista sufrirá una gran remodelación.
El Manchester United es el que más interesado ha estado en los últimos tiempos y su nombre seguirá apareciendo mientras no confirme la renovación del español David de Gea. Sin embargo, hay un club que se ha incorporado en los últimos meses y que se ha situado en la 'pole position' por Yassine Bono. Se trata del Tottenham.
El club londinense mantiene una relación fluida con el Sevilla, con el que ha realizado varios negocios en los últimos años. Bryan Gil de ida y vuelta, Erik Lamela o la operación frustrada de Sergio Reguilón. Y está barajando cambiar de portero. Hugo Lloris ya tiene 36 años y acaba contrato el próximo año, de ahí que ya estén pensando en un relevo.
Su idea original era buscarse un guardameta como el internacional francés, al que reclutaron en una edad buena y lo han podido mantener durante una década. Yassine Bono no cuaja con ese perfil, pero a falta de un relevo fiable, el marroquí sí da seguridad y rendimiento inmediato.
Hace unos días, AS publicaba que el Tottenham llamó al Sevilla en enero para preguntar por las condiciones de una salida de Yassine Bono. El Sevilla le dijo que su precio era 30 millones de euros. Una buena cifra para los precios en los que se está moviendo el mercado de porteros en los últimos años.
Pero según publican medios ingleses, el Totenham comenzará más abajo y el precio de entrada que pondría encima de la mesa sería de unos 18 millones de libras, poco más de 20 millones de euros. Una cifra que puede parecer baja, pero que permite llegar a un acuerdo, con las variables que puedan manejarse, en una cifra intermedia. Aún queda mucho para el mercado de fichajes, pero los pretendientes van tomando posiciones.