La sincera y agridulce confesión de Marcao en su peor época del año

El nacimiento de Martina, su cuarta hija, un motivo extra de alegría para el central del Sevilla, que ha vuelto a celebrar por sexto año seguido sus Navidades más tristes

La sincera y agridulce confesión de Marcao en su peor época del año
El brasileño presentó en sociedad a la pequeña del clan, la primera sevillana. - @teixeira_marcao
Óscar MurilloÓscar Murillo 5 min lectura

Este miércoles 18 de enero nacía Martina, la tercera hija del matrimonio que forman el central del Sevilla FC Marcao y su esposa Pan. Una alegría extra para un futbolista que pasa por tiempos difíciles en lo profesional y que, encima, acaba de atravesar por la peor época del año para él. Sólo el nacimiento hace tres años de Bella, la segunda del clan tras Luiza, suavizó un 10 de noviembre la amarga sensación que para el zaguero, que también es papá de María Vitória (la mayor, que, curiosamente, vino al mundo también en el penúltimo mes del año), supone desde hace seis años la llegada de la Navidad. Una época entrañable y familiar que se le atraganta al de Londrina desde el inesperado fallecimiento de su hermano mayor.

Jugaban en la misma posición y ambos eran zurdos, aunque Dionatan do Nascimento Teixeita era todavía más alto (1,93 por 1,85). Y, curiosidades del destino, se formó futbolísticamente hablando en Eslovaquia, llegando a adquirir la nacionalidad y siendo internacional sub 21 con esa camiseta. Así, después de pasar por las categorías inferiores del Maringa, el Londrina y el Arapongas, creció en el MFK Kosice, que lo cedió un año al Slovan de Bratislava. El defensor jugó también en el Banik Ruzina y el Banska Bystrika antes de dar el salto a la Premier League con el Stoke City. Además de una breve experiencia en League One con el Fleetwood, este emigrante del balón tocó techo al proclamarse campeón de la Liga de Moldavia con el Sheriff Tiraspol, de nuevo de moda en toda Europa. Con tan sólo 25 años de edad, murió víctima de un ataque cardíaco el 5 de noviembre de 2017, razón de más para que cada final de año desde entonces sólo Bella y, ahora, Martina permitan a Marcao esbozar una sonrisa.

Compartir en sus redes sociales la imagen de la pequeña de la saga trajo más alegrías que desengaños al central nervionense, que, si bien es cierto que tuvo que eliminar algunos comentarios que no venían a cuento (no es el caso, porque los hubo muy desagradables y desafortunados, mientras que en éste se adivinaba la sorna cuando un tuitero le recomendó que pidiese la baja de paternidad), recibió el cariño de muchos sevillistas, que pudieron comprobar el gran nivel que pueda dar el ex del Galatasaray, que, por desgracia, solamente ha podido disputar 585 minutos oficiales con su nuevo equipo. "Eso es lo que más quiero", contestaba Marcao a la felicitación de un seguidor blanquirrojo, que recordaba que ya sólo faltaba que volviese al césped. Según cuentan sus más allegados, la desesperación por este infortunio con las lesiones ha llegado a hacer llorar en ocasiones al jugador, que trabaja duro para fortalecer la pierna y, de esta forma, evitar las temidas recaídas.

Aterrizó el 8 de julio de 2022 en la capital hispalense, después de abonar el Sevilla FC doce millones de euros a los turcos, aunque lo hizo fuera de forma y con una pequeña dolencia que condicionaría su pretemporada a las órdenes de Julen Lopetegui. Ya en agosto, al intentar forzar para ponerse al ritmo de sus compañeros, sufrió una microrrotura en el isquiotibial de la pierna izquierda. Jorge Sampaoli no dilató su debut, hasta el punto de que lo hizo coincidir con el suyo ante el Athletic, sin alta médica, aunque en principio todo fue bien, dadas las ganas del zaguero de ayudar. En noviembre, tuvo que retirarse en la visita al Manchester City con una rotura del bíceps femoral de la otra pierna, la derecha, volviendo a romperse en un entrenamiento durante el parón, lo que derivó en la recomendación de que no apostara ya por tratamientos conservadores, sino por una intervención. El 23 de diciembre, fue intervenido en Madrid por los cirujanos Lass Lempainen y Pedro Ripoll, con un pronóstico de 12 semanas que, inevitablemente, fijan un nuevo retorno no antes del mes de marzo.

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