La vergonzosa estadística y un amago final de escrache

El Sevilla FC ha terminado la temporada 24/25 con 41 puntos, uno más que el CD Leganés, primero de los que descienden a Segunda división. Igualan los blanquirrojos su peor registro en lo que va de siglo XXI (un cuarto), pues también firmó las mismas unidades el curso pasado, acabando entonces el 14º, mientras que ahora es 17º. Un descalabro que se cobra lo único que había en juego en esta jornada final, pues el Villarreal CF ya tenía atada la quinta plaza y no podía asaltar la cuarta, que habría añadido a la Champions League el 'caramelo' de la Supercopa de España. Por su parte, la salvación matemática ya era una realidad en Nervión desde la entrega 36ª, con el 1-0 ante la UD Las Palmas, el único triunfo en las once fechas finales. No dejar más espacio entre ellos y el descenso supone pérdidas importantes para los blanquirrojos, que dejan de ingresar unos 3,5 millones de euros.

Es la diferencia entre los casi siete millones que habrían caído en gracia al club hispalense de haberse impuesto a los castellonenses, lo que le habría permitido escalar hasta la 14ª posición. Incluso, un empate habría permitido que cambiaran de manos 5,1 millones, pero Del Nido Carrasco y su consejo deberán conformarse con sólo 3,4. Y es que, desde que en la 96/97 comenzaron a premiarse las victorias con tres puntos, existen apenas dos precedentes peores en cuanto a clasificación. Fue, precisamente, ese primer curso tras el cambio y en la 99/00, cuando el Sevilla FC acabó el 20º y, lógicamente, descendió a Segunda división: antepenúltimo, con 43 unidades, y colista, con 28, respectivamente. Una estadística para la vergüenza que también señala al presidente, pues, desde que llegara al poder, solamente tres equipos (los grancanarios, el Real Valladolid y el Getafe CF) acumulan más derrotas, habiendo encajado 84 goles en 58 partidos (prácticamente 1,5 por encuentro), apunta Fran Martínez (@LaLigaenDirecto).

Aunque la misma afición nervionense está un poco harta de manifestarse para que nada cambie, decenas de aficionados se animaron unos a otros a través de las redes sociales para acudir al Aeropuerto de San Pablo y hacer ver a sus técnicos, futbolistas y directivos que la imagen en Villarreal había sido indigna. Pronto se dispersaron, ya que trascendió que la expedición sevillista volaría directamente desde Castellón a Casablanca para hacer noche allí y preparar el amistoso de este martes ante el Wydad marroquí (21:00 horas) en el último compromiso antes de las vacaciones, que deben servir para abrir un amplio debate y una profunda reflexión en el Ramón Sánchez-Pizjuán.