Corberán quiere que el Valencia repita en verano su forma de fichar en el mercado de enero

Tras poner punto final a la temporada con el empate del pasado viernes ante el Betis, los jugadores del Valencia ya están de vacaciones. En concreto 17 de ellos, porque los ocho restantes ya se han despedido, como es el caso de Jaume Doménech, Mamardashvili, Foulquier y los cedidos Max Aarons, Enzo Barrenechena, Iván Jaime, Rafa Mir y Umar Sadiq. No se ejercerán la opciones de compra que se poseen por algunos de ellos, lo que no quiere decir que durante el verano se puede volver a negociar con sus clubes. Pero si a esos nombres se suman las posibles ventas de Mosquera o Javi Guerra y los descartes de Guillamón Sergiy Canós, la realidad es que al director deportivo, Miguel Ángel Corona, se le presenta por delante un verano bastante movido en el que estará obligado a cerrar un buen puñado de incorporaciones.

Para ello, según informa Relevo, esta semana esta previsto que haya una reunión entre Javier Solís, director general del club, el propio Corona y Carlos Corberán, que al contrario que sus jugadores no se ha ido de vacaciones. En su lugar, el técnico valenciano quiere estar muy al tanto de todo lo que se cuece en una planificación en la que quiere tener voz y voto, aunque, como siempre, todo dependerá de lo que dictamine Peter Lim desde Singapur.

La duda reside en saber qué coste de plantilla impondrá el empresario y qué cantidad estima necesaria recaudar mediante traspasos. Pero, sobre todo, la esperanza de quienes trabajan en el día a día de la entidad es que su dueño cambie el modo de proceder y permita utilizar un porcentaje de lo ingresado por las ventas para reinvertirlo en refuerzos. Ahí está la clave que permitiría al conjunto che dar un paso al frente.

A la espera de que le informen de cuál es el plan de la familia Lim en los próximos días, Corberán asume la realidad del club, de la que ya era consciente cuando firmó. Sabe que no habrá una fuerte inversión ni le harán una plantilla para pelear por los puestos altos. Pero su objetivo es que al menos se puedan llevar a cabo movimientos como los realizados en el pasado mercado de enero, cuando aterrizaron Iván Jaime, Umar Sadiq y Max Arons a préstamo.

Creatividad ante la falta de recursos

El ex entrenado del West Brom considera que el trabajo realizado codo con codo junto al director deportivo fue más que positivo y quiere repetir la fórmula. Sin invadir parcelas, pretende tener un rol protagonista y desde su entorno aseguran que ''confía en que le dejen hacer cosas''. Para ello, ya ha anunciado que el reto es “intentar hacer una plantilla lo más competitiva posible a partir de un presupuesto”. Ante la falta de recursos, la palabra clave es creatividad, que pasará por nuevas cesiones, trueques u ofertas por porcentajes.