El Valencia, pendiente de su traspaso

Un verano más, el Valencia se moverá en el mercado de fichajes en busca de oportunidades que no supongan grandes desembolsos. La prioridad es hacerse con jugadores libres, como Dani Raba, que ha firmado a coste cero tras acabar contrato con el Leganés; o cedidos, fórmula elegida para el desembarco de Agirrezabala, aunque en su caso se negocia incluir una opción de compra con el Athletic. Por contra, Ron Gourlay, la figura impuesta por Peter Lim para supervisar la planificación, ha rechazado invertir 350.000 euros más variables en el joven Warren Madrigal, que tras ser descartado por los ches ha sugrido una grave lesión de peroné con su selección.

Ante esta situación descrita, cualquier ingreso, por pequeño que sea, es celebrado en las oficinas de Mestalla. Por ello, se está pendiente del próximo movimiento de Gonzalo Villar, que a falta de oficialidad ha llegado a un acuerdo para firmar por el Dinamo de Zagreb. En un principio, desde el Granada habían asegurado que no existía le necesidad de vender y el propio centrocampista aseguró que se quedaría un curso más en Segunda división para luchar de nuevo por el ascenso. Pero todas esas palabras se las ha llevado el viento.

El club croata pagará en torno a tres millones de euros por el murciano y el Valencia se llevará un pellizco gracias a los derechos de formación que estipula la FIFA, que pueden alcanzar el 5% del total de cada traspaso internacional si el futbolista en cuestión ha militado en el equipo reclamante entre los 12 y los 21 años.

En su caso, Gonzalo Villar militó tres temporadas en la cantera che, entre los 17 y los 20 años. Llegó procedente del Elche siendo juvenil, previo pago de 175.000 euros, y regresó al conjunto franjiverde a cambio de 4 millones de euros. Un negocio al que ahora se añadirían en torno a 45.000 euros más, pues el reparto de los citados derechos se divide por edades y en su caso correspondería el 0,5% por cada campaña que militó en la Academia (1,5% en total).

Tercer destino extranjero

A sus 27 años, será la tercera aventura lejos de nuestro país de un futbolista que ha sido importante las dos últimas campañas en el Granada, superando en ambos casos la treintena de partidos. No tuvo la misma suerte en la Roma, que lo fichó por cinco millones en enero de 2020 y lo cedió en dos ocasiones al Getafe y en otra a la Sampdoria.