Setién y Lo Celso, tensión total

El técnico del conjunto amarillo le arrancó una pulsera de hilo que llevaba el argentino en la mano para que pudiese entrar, de una vez por todas, en el terreno de juego y ayudar a sus compañeros en el trascendental envite contra la Real Sociedad (2-0)

Setién y Lo Celso, tensión total
Setién, dirigiendo el partido ayer en La Cerámica. - Twitter / Villarreal CF
Alberto GálvezAlberto Gálvez 3 min lectura

Hay cosas en el fútbol que no llegan a entenderse. Y una de ellas es la pasividad con la que viven algunos futbolistas el partido desde el banquillo. Algunos incluso se llevan pipas como si de un espectador se tratase. Y luego, cuando llega el momento de entrar, todo son prisas y a más de uno se les ha olvidado colocarse las espinilleras o se ha dejado la camiseta en el vestuario. Pero es el fútbol de la época, donde es mejor salir bien peinado que completamente ataviado por si necesita el míster un cambio urgente.

Pues ayer en La Cerámica se vivió precisamente uno de estos episodios entre Quique Setién y Lo Celso. El cántabro decidió dar entrada al argentino en el terreno de juego en el minuto 61 en un doble cambio junto con Jackson. Salieron del campo Morales y Terrats. Sin embargo, el exjugador del Betis no pudo entrar y se abrió la posibilidad de que durante unos instantes al equipo amarillo estuviese con un jugador menos sobre el césped. El motivo, una pulsera de hilo que se le había olvidado quitarse.

Después de que pasaran unos segundos y el cuarto árbitro no dejara de dialogar con el centrocampista para darle las respectivas explicaciones, se acercó Xisco Nadal, delegado del Villarreal, quien comenzó a discutir tanto con el colegiado que estaba en la banda como con el propio jugador. Pero ninguno consiguió solucionar el conflicto. Hasta que Quique Setién se acercó para ver lo que pasaba y saber por qué no entraba su jugador. Y fruto de la tensión que se vivía en esos momentos, donde el partido iba 0-0 y la Real Sociedad podría quedarse con un jugador más, el técnico del Villarreal decidió tomarse la justicia por su mano y le arrancó la pulsera con un tirón para que pudiese saltar al campo.

Tras el partido, Setién explicó todo lo sucedido: "El cuarto árbitro vio un hilo que tenía rodeándole la muñeca y parece ser que es un arma posible y que no la podía llevar. En otros partidos se lo han permitido o no lo han visto. El cuarto árbitro, muy educadamente, me ha dicho que tiene que hacer su trabajo y es verdad, y le ha obligado a quitárselo y por eso hemos tardado más".

Ahora, queda por saber el significado sentimental que tenía esa pulsera para Lo Celso y si le sentó bien que su entrenador tomara dicha decisión.

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