Carlos Sainz pierde la confianza en Williams
Tras todos los problemas del Gran Premio de Miami, Carlos Sainz parece estar pasando por algunos de los momentos más complicados desde que está en Williams, al punto de afirmar haber perdido la confianza en los de Grove

El Gran Premio de Miami ha sido una montaña rusa para Carlos Sainz. El piloto madrileño está cada vez más cómodo con el Williams, a la par que el coche ha mejorado ostensiblemente, al punto de que ha saltado de pelear por mandar en la zona media a directamente luchar, al menos en la prueba de Miami Gardens, con Ferrari por ser uno de los 4 mejores equipos. Sin embargo, todo lo bien que parecía irle al español se tornó en drama en la carrera larga del domingo, en la que las cosas empezaron a salir mal por golpes de mala suerte repentinos.
Un toque con Albon; malas decisiones del equipo; o incluso un 'virtual safety car' marchándose cuando no tocaba. Todo eso lastró y mucho a un Sainz que salía sexto, pero que finalmente cayó hasta la 9ª plaza. Aunque el mayor problema no fue ninguno de esos, si no que lo que más le molestó fue el trato de la escudería de Grove, con la que acabó disgustado a unos niveles que no se le habían visto en todo lo que va a de temporada.

A las palabras de su ingeniero de pista felicitándole por el trabajo hecho, con su 9º y el 5º de Albon y con la pelea contra Ferrari durante tantas vueltas, Carlos explotó: "Sí, así no es como corro, chicos, me da igual. He perdido mucha confianza aquí... en todo". Y es que cuando estaba peleando la posición con Albon, el tailandés no se reprimió y lo atacó. Además, tuvo la opción de quedarse cerca para cederle el DRS y que se pudiera defender de los Ferari, al igual que hizo él en Jeddah, pero el tailandés se fue, dejándolo solo ante el peligro, lo que le molestó sobremanera.
Afortunadamente, sin sanción
Por otro lado, no se puede pasar por alto que las cosas pudieron ser aún peores. Y es que en la última curva, en un intento desesperado de atacar a Lewis Hamilton por la octava plaza, Sainz se estrelló con el inglés, algo que no modificó las posiciones, pero pudo acabar en drama. Lógicamente, se temió por una sanción, aunque al final tuvo suerte y no llegó, lo que le permitió mantener los dos puntos. Aunque a su favor se puede decir que tenía una renta sobre los catorce segundos con Yuki Tsunoda, décimo, así que seguramente se hubiera mantenido en estos puestos de honor. Aunque con algo más de fortuna pudo haber terminado mucho más arriba.