La historia del “safety car” y cómo revolucionó las carreras
El safety car o coche de seguridad juega un papel fundamental dentro de las carreras de Fórmula 1 ya que es el que se encarga de liderar la carrera en situaciones de peligro
La importancia del safety car desde su invención en la Formula 1 ha sido de las cosas más positivas introducidas en el deporte de automovilismo. Su llegada significó una revolución dentro de las carreras ya que como su propio nombre indica, es el encargado de velar por la seguridad cuando se produce alguna situación de peligro. La forma de actuar es bastante sencilla, simplemente se encarga de liderar la carrera cuando ha ocurrido algún accidente o algo amenaza la normalidad de la carrera. Es ahí donde juega un papel fundamental.
Con la introducción del safety car, las carreras pudieron tener un mejor control ya que cuando este interviene siendo el primero de los vehículos en la carrera, se controlan las situaciones de peligro, más que nada porque permite que los participantes de la carrera corran a velocidades más bajas y puedan ser reincorporados a la carrera.
El origen del coche de seguridad
La fórmula 1 exige seguridad cuanto menos, algo que siempre ha existido debido al alto riesgo de accidentes y siempre han existido vehículos designados para velar por la misma. Fue a partir del año 1993 cuando se produjo la revolución en este aspecto con la introducción del coche de seguridad. Durante el año anterior es estuvieron realizando todas las pruebas pertinentes de este nuevo invento. Hasta la fecha, las interrupciones de las carreras de Fórmula 1 eran más frecuentes debido a que la regularización en caso de accidentes no era tan precisa.
La evolución del safety car
Al igual que el deporte automovilístico ha dado pasos de gigante durante los años, también lo ha hecho el coche de seguridad a través del coche se seguridad. Su evolución se ha visto sobre todo en la introducción de modelos de mayor potencia y seguridad. Por ejemplo, en la Fórmula 1, Mercedes-AMG ha suministrado el safety car desde 1996, con modelos como el AMG GT R siendo el más potente de la historia, con una potencia de 585 CV y una velocidad máxima de 318 km/h.
La revolución del safety car
Las ventajas del safety car van más allá de una mayor seguridad ya que además de esta puede cambiar la estrategias de las escuderías como por ejemplo aprovechar la presencia para cambiar neumáticos o realizan algún adelantamiento. Además produce un marco totalmente diferente en la carrera antes de entrar por lo que le otorga un plus de emoción a la misma debido a que altera el orden de la carrera.
Otro aspecto importante en lo referente a su evolución es la de los cambios en el reglamento de las carreras, como la introducción de la bandera roja, la regulación de las salidas de los boxes y la gestión de las vueltas.