Lando Norris triunfa en el peor día de Fernando Alonso

Esta edición del Gran Premio de Mónaco presentaba la gran novedad de que iba a tener la obligatoriedad de pasar hasta dos veces por boxes. Tantos años de procesiones por el Principado necesitaban un cambio, pero ha estado lejos de ser una solución. Las estrategias extrañas se han sucedido y al final quienes han reinado han sido los más hábiles para gestionarlas. No tanto por la parte alta, donde todo ha terminado tal y como ha empezado y Lando Norris ha llevado el McLaren a lo más alto, seguido de Leclerc, Piastri y Verstappen, pero tras ellos la historia ha sido muy distinta.

En todo el domingo habíamos visto salidas de locura en la F2 y la Porsche Supercup, pero la Fórmula 1 ha aguantado mucho mejor y no ha pasado nada. Norris ha bloqueado las gomas, pero ha mantenido el coche por delante del empuje de Leclerc. De hecho ha sido un inicio de carrera muy tranquilo salvo por un choque de Bortoleto y otro de Gasly, pero han evitado que saliera el safety car. Esto ha llevado a que todo se decidiera en el momento clave, las paradas en boxes y las estrategias.

Los boxes, clave

Sin embargo, los que mejor se han movido han sido los Racing Bulls, con Lawson haciendo un tren sumamente lento desde el 9º puesto, generando un hueco de casi un minuto para que Isak Hadjar hiciera sus dos paradas antes de la vuelta 20, por lo que lo tenía en su mano para certificar ese gran puesto. En ese baile el gran perjudicado ha sido Fernando Alonso, que se ha comido un 'undercut' de Lewis Hamilton y muy pronto se ha visto anclado a la 7ª posición. No obstante, faltaba lo peor para Alonso, cuyo Aston Martin no parecía ir nada bien y al final, después de la segunda parada y de que de nuevo se le colara Esteban Ocon, ha notado que algo iba mal en su motor, que ha dicho basta, obligándole a abandonar.

Esta táctica de parar a los rivales para hacer las paradas la han seguido también en Williams, primero con Sainz parando el tráfico y Albon entrando, y viceversa, lo que les ha dado un 9º y un 10º, puestos muy reseñables. Por detrás de ellos los Mercedes han quedado fuera de los puntos, hundidos en la frustración por no poder hacer frente a nada de esto.

La ha faltado suerte a Verstappen

Max Verstappen tenía un objetivo, que no era otro que ganar, y para conseguirlo tenía que hacer algo diferente. Su idea ha sido no parar y esperar una bandera roja. Así se ha plantado en las últimas vueltas primero, haciendo un tren delante de Norris, Leclerc y Piastri. Pero al de Hessalt no se le ha aparecido la virgen en forma de bandera roja y al final ha tenido que entrar en el último giro, lo que le ha relegado a la cuarta posición. Así que Norris ha vuelto a hacer buena la pole para certificar el triunfo y recortar puntos en la general a Oscar Piastri.