Fernando Alonso declara su amor en Mónaco

"Amo conducir, amo conducir aquí". Hacía mucho tiempo que no veíamos a Fernando Alonso hablar en esos términos, pero es que tras su larguísima travesía por el desierto, parece que al fin le ha tomado el pulso al Aston Martin. Tras tanto tiempo en el que el objetivo era no ser el peor coche, ya son tres pruebas seguidas en las que logra colarse en la Q3, y en Mónaco lo ha hecho a lo grande, con un séptimo que por una milésima no ha sido sexto. Las estrechas calles del Principado le dan más importancia a las manos de los pilotos y en esa suerte no ha casi nadie como él.

Lo primero que ha hecho al bajarse del Aston Martin ha recalcado que aunque el quinto de Imola era más importante por lo mal que llegaba, Mónaco siempre es diferente por la adrenalina que genera la pista y los riesgos que hay que tomar en cada vuelta. Además, esta vez no ha tenido ni una sesión tranquila, pero eso es lo bonito de este GP. "En la Q1 estaba fuera en el último minuto, cuando empezaba la vuelta en Rascasse. Era 16º. Pero esto es Mónaco, el mejor sábado del año.Hay adrenalina y diversión, emoción al volante".

Por eso mismo ha recalcado que es por estos días por los que sigue pilotando, ya que "es una recompensa terminar una vuelta después de tomar tantos riesgos”. Aunque fue a la clasificación algo preocupado con las prestaciones tomó riesgos y le funcionó. "Cuando no tienes la necesidad de puntuar te da igual salirte o acabar contra el muro, aunque no lo quieras te lo quitas de la cabeza. Y haces la crono con una libertad que no tendrías cuando luchas por el Mundial”.

Todavía queda el domingo, cuando se juegan los puntos

Este 2025 se pone en marcha una nueva reglamentación que obligará a hacer dos paradas a todos los pilotos, algo que se hace para generar más acción, pero que para el español puede ser una ventaja. "En un Mónaco normal diría que el séptimo es el mejor resultado posible, pero las nuevas reglas abren la estrategia". Pone el foco en los que están fuera del top-10, quienes probarán estrategias alternativas, pues están fuera de los puntos y tienen que intentar algo. Por eso mismo, esta vez incluso echa de menos las reglas pasadas. "De alguna forma esta vez me gustaría que Mónaco tuviera las normas antiguas, porque eso garantizaría la séptima posición. Pero esta vez podemos tener suerte y ser cuartos o quintos, o tener mala suerte y terminar otra vez fuera de los puntos".