Pecco Bagnaia da con la tecla de su Ducati

Las cosas no están siendo nada fáciles para Pecco Bagnaia este 2025, donde no termina de encontrase a gusto con su Ducati, al punto de que ha reconocido que se equivocó en pretemporada al elegir la configuración para este curso. Y es que el italiano ha pasado de ser un candidato perenne a luchar por cada triunfo, a estar lejos de los mejores, pues pese a ser el tercero de la general, la realidad es que sigue a años luz de su compañero de equipo y quien con casi total seguridad va a terminar alzando el título dentro de unas semanas, Marc Márquez.

Un buen ejemplo ha llegado en el Gran Premio de Hungría, un fin de semana en el desconocido circuito de Balaton Park, donde las cosas no le han salido bien desde la primera sesión hasta la carrera larga. Ya al quedarse fuera de la Q2 se vio relegado a pelear por un imposible y la 13ª y la 9ª plaza no hacen si no que refrendar esta situación. No obstante, no todo lo que se lleva del trazado magiar es malo, si no todo lo contrario, pues ha confesado tras la prueba larga que ha encontrado algo a lo que agarrarse de cara al futuro en la configuración de su GP25.

Motivos para soñar

Tras la carrera Pecco ha recalcado que han hecho un cambio grande en la moto que les ha supuesto una buena ayuda y sus sensaciones han mejorado drásticamente. "Me he encontrado mejor y podía frenar fuerte. Me he equivocado dos veces frenando pero cuando cambias tanto, hay reacciones que no te esperas. Pero es algo que sabía que podía ocurrir". De hecho, se ha notado en el resultado, pues aspiraba a un séptimo puesto y hasta una 'long lap' estaba para conseguirlo.

Por eso es positivo y está contento, porque lo importante era coger confianza y eso lo ha logrado. Además, ahora llega el GP de Cataluña, donde tiene una gran oportunidad. "Estoy muy contento de ir a Barcelona. Es un circuito que en los últimos años se me he dado muy bien. Pienso que con estos ajustes que hemos hecho será mejor. Es extraño pero estoy contento de decir que he terminado noveno. Sabía que no iba a ser fácil, pero acabar con estas sensaciones ha sido positivo, la verdad". Así que aunque el título ya sea un imposible a 227 puntos de Marc, poder luchar por victorias y podios hasta el final de temporada sería un motivo de celebración.