Todos los ojos miran a Marc Márquez en Misano

Marc Márquez llegará a Misano sin opciones de ganar el título, pero eso sí, con todos los ojos puestos en él, pues será el gran favorito para conseguir la victoria en ambas carreras

Todos los ojos miran a Marc Márquez en Misano
Marc Márquez durante un Gran Premio de MotoGP en 2025 - Cordon Press

Marc Márquez estaba atravesando una racha histórica en este mundial 2025 de MotoGP, en el que hasta llegar a Montmeló sumaba 7 dobletes consecutivos. Sin embargo, en el trazado catalán su hermano Álex le arrebató el triunfo en la carrera larga, poniendo así fin a la racha y certificando otra cosa, que el 93 no iba a llegar con opciones matemáticas a la siguiente carrera, la de este fin de semana, que tendrá lugar en Misano. Ganar en Italia hubiera sido algo muy grande para Márquez y sobre todo para Ducati, por ser su 'casa', pero no podrá ser, aunque aún así será el favorito y buscará dejarse en bandeja la corona de cara a Motegi.

El del Lenovo aterriza en Misano como el grandísimo favorito, pues pese a no ser una de esas pistas donde siempre ha arrasado, si que ha tenido buenos resultados. Un ejemplo fue el año pasado, cuando llevó a la GP23 al tercer puesto del podio. Pero en su carrera ha tenido grandes éxitos en ella, como las tres victorias, en 2015, 2017 y 2019, además de los dos segundos puestos en 2013 y 2018. Por eso mismo ahora que viene en esta deriva tan dominante es imposible no colocarle ahí, pese a que también sabe lo que es besar la grava, lo que le pasó en 2014.

No obstante, si algo tiene Misano es que es un trazado que invita a la lucha, pues es uno de esos en los que escaparse es sumamente difícil, lo que podría generar que tanto Marc como Álex o incluso Pecco Bagnaia, puedan luchar por la victoria. Además, en las últimas citas estamos viendo a otros motos crecer, sobre todo las Aprilia y las KTM, que también podrían tener mucho que decir.

El mundial, para Japón

Pase lo que pase y aunque Marc gane las dos carreras, como mucho puede sumar 37 puntos, lo que aunque su hermano Álex haga un 0 no le daría para certificar el mundial. Aunque eso sí, a poco que saque algo de margen, en Motegi, casa de Honda, su antiguo equipo, tendría más que accesible el levantar el título y certificarse como el mejor del planeta por séptima vez en la categoría reina, recuperando la corona seis años después y tras pasar un calvario, precisamente en sus años finales con la marca del ala dorada, en la que tan mal lo terminó pasando.