Unay Emery aterrizó el pasado año en Londres con el difícil objetivo de suplir a
Wenger y una firme premisa, volver a hacer del
Arsenal ese conjunto temible por sus rivales y pelear por títulos. En la
18/19, los 'gunners' no llegaron a alcanzar en su plenitud la preciada regularidad en el campeonato liguero, quedándose a un solo punto del cuarto puesto que otorga derecho a disputar la
Champios League; plaza que ocuparía su rival por excelencia: el
Tottenham Hotspur.No obstante, el técnico vasco volvió a brillar en la que se ha convertido en su competición por excelencia, la
Europa League, llegando hasta la final y superando en el camino con solvencia a todos sus competidores (en el recuerdo está el
7-3 global que le endosó al
Valencia). Sin embargo, la ilusión se convirtió en decepción después de caer derrotado en la finalísima ante el
Chelsea de
Hazard, prolongándose así la negativa racha de
24 años sin lograr un título europeo (desde la Recopa de 1994).
Este año, tanto el presidente como el entrenador 'gunner' quieren dar un paso más y es por ello que han asumido un notable esfuerzo para confeccionar as
í una de las mejores plantillas del Arsenal en su última década. La portería estará custodiada por
Bernd Leno después de que el mítico
Peter Cech colgara los guantes, comandando una línea defensiva que quizás sea la parcela más fragil del Arsenal aunque estará igualmente compuesta por jugadores de renombre tales como
Kolasinac, Sokratis, Mustafi y
Bellerín.El centro del campo ha sufrido una revolución que promete tardes de gloria.
Torreira y
Xhaka respaldarán a un
Ceballos que asumirá todo el protagonismo en la línea de creación; sin olvidar a
Özil, quien deberá hacerse con un hueco bien en la mediapunta o escorándose en banda.
Por si fuera poco, la vanguardia estará compuesta por tres delanteros que en su totalidad lograron la pasada campaña 99 tantos. La velocidad y el olfato de
Aubameyang y
Lacazzete contrastarán con el que ha sido uno de los fichajes estrellas londinenses del mercado estival:
Nicolas Pépé, reciéntemente adquirido tras un desembolso de
80 millones de euros.Las piezas están sobre el tablero y tan solo queda observar si
Unay Emery será capaz de obtener el rendimiento esperado de un equipo hecho a su medida para volver a alzarse con la
Premier League, un hito que no sucede desde la
2003-04. 
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