Sorpresón mayúsculo en el Mundial de Tokio

La primera gran sorpresa del Mundial de Atletismo de Tokio 2025 saltó en la jornada matinal del segundo día de competición. Uno de los grandes favoritos en el mediofondo, el noruego Jakob Ingebrigtsen, caía eliminado en primera ronda de los 1.500 metros.

El 'crack' nçordico llegaba de lograr los dobletes en 1.500 y 3.000 en pista cubierta en los Mundiales de Nanjing (China) y los Europeos de Apeldoorn (Países Bajos) celebrados a principios de año. Sin embargo, Ingebrigtsen no había vuelto a competir entre marzo y septiembre por una lesión en un tendón de Aquiles.

Eso ha frenado su progresión, ya que no pudo volver a entrenarse hasta julio, en la altitud de St. Moritz (Suiza). El nivel con el que llegaba a Tokio era una incógnita y, de primeras, parece claro que no está para luchar con los mejores en la distancia reina del mediofondo.

El noruego nunca se sintió cómodo en carrera y, cuando hubo que cambiar de ritmo en la última vuelta, las piernas no le respondieron como siempre. Acabó octavo en su serie con un tiempo de 3:37.84.

"Creo que ahora mismo estoy más cerca de la carrera de 5.000 metros. Me recuperaré y tendré un par de días buenos hasta que vuelva a competir en las eliminatorias y lo intente de nuevo. Todo es una prueba. Intenté dar lo mejor de mí para pasar a la semifinal, pero fue terrible. Hay que empezar y hay que intentarlo", reconocía Jakob Ingebrigtsen, quien no podía negar lo mal que lo había pasado en las series de 1.500 del Mundial de Tokio.

Ingebrigtsen ya sabe lo que sienten los que caen a las primeras de cambio. "Es la primera vez que no paso a la siguiente ronda. Por supuesto que es muy decepcionante pero al mismo tiempo es una llamada a la realidad. Se trata de una prueba muy competitiva. Hay que prepararse al máximo y, evidentemente, yo no lo he hecho", concluía.

Chepchirchir, nueva campeona del mundo de maratón

La gran cita de la pasada madrugada, no obstante, era por las calles de Tokio. Si el Mundial se abrió con los 35 km marcha, este domingo era el maratón femenino, que ha coronado a la keniana Peres Chepchirchir, que ganó en el último esprint a la plusmarquista mundial, la etíope Tigst Assefa.

Japón se le da bien a la keniata. Chepchirchir ya fue campeona olímpica hace cuatro años, aunque aquel maratón de Tokio 2020 se celebró en Sapporo. Ahora, ha celebrado un nuevo triunfo en tierras niponas, en este caso en unos Mundiales y en la capital. La keniana, más fuerte en los metros finales que Assefa, cambió el ritmo en la entrada al Estadio Olímpico y su rival no pudo seguirla. Chepchirchir paró el crono en 2h24:43, dos segundos menos que la etíope.

La sorpresa llegó por detrás. La uruguaya Julia Paternain entró en tercera posición sin saber que lo era y ni lo celebró. Nacida en México y nacionalizada este año uruguaya, la atleta latina sumó su segunda medalla en otros tantos maratones que ha disputado. "No puedo creerlo. Estoy en shock. Al llegar a meta no estaba prestando atención a mi tiempo, solo intentaba correr, y puedo decir que fue una gran experiencia. El público fue realmente increíble", admitía Paternain.