La cita ante el Athletic ofrece al Sevilla la posibilidad de dejar encarrilada la clasificación para la Champions, pues la jornada contempla un
duelo directo entre Getafe y Villarreal, principales rivales del Sevilla por obtener el pasaporte a la elite continental.
Si los nervionenses ganan y se produce un empate en el Coliseum,
los de Lopetegui aventajarían en ocho puntos a los amarillos y en nueve a los madrileños, a falta de nueve por jugarse. Además,
cazaría al Atlético de Madrid, a tres tras empatar contra el Celta.
Para ello,
Lopetegui no introducirá demasiados cambios en el once con respecto a Eibar más allá de los condicionados por cincuntancias fuera de control del téncico, si bien es difícil predecir que hará en determinadas posiciones. Lo que está claro es que habrá un
cambio en la portería, la demarcación en la que menos ha rotado este curso por la titularidad indiscutible de
Vaclik. El checho se lesionó ante el los armeros y estará de baja varios partidos, por lo que
ocupará su posición Bono, que sólo ha jugado dos encuentros en Liga esta temporada, ambos con victorias ante Getafe y Osasuna.
Otro cambio seguro será en el eje de la zaga, al que
vuelve Koundé tras cumplir sanción contra los vascos para formar la pétrea pareja con
Diego Carlos. Al igual que ocurre con el brasileño, tampoco se espera que descanse
Navas, mientras que en la
izquierda es muy probable que
haya relevo entre Reguilón y Escudero tras la titularidad del pucelano en el último choque.
En la medular se prevé
un doble pivote con Fernando y Jordán para combatir a un equipo tan físico y corpulento como el Athletic, lo que supondría
la salida del once de Banega o Óliver, con más opciones, a priori, para el rosarino de coger la batuta.
Es complicado vaticinar que hará en ataque Lopetegui, al que le encantaría eternizar a su tridente pregerido tras el parón, pero que quizás introduzca alguna variación.
Podría entrar Suso, posiblemente por
Munir, y cabría alguna posibilidad de que
En-Nesyri relevara a De Jong. En principio, Ocampos parece intocable.