Antonio José Medina4 min lecturaCarlos Alcaraz, como preveía, tuvo que pelear para superar su estreno en el ATP 500 de Doha ante todo un campeón de Grand Slam como Marin Cilic, quien, pese a que está agotando su carrera y sólo juega con cuentagotas, aún mantiene intactas las armas que le hicieron grande.
Una hora y 40 minutos aguantó el croata el empuje del tenista español, que ha ganado los cuatro últimos duelos a Cilic tras ceder en el primero. La única derrota llegó en 2021, cuando Alcaraz apenas llevaba unos meses en el circuito y él estaba aún entre los mejores. Pese a ello, en la tierra batida de Estoril, el tenista murciano le ganó un set.
Esos primeros compases de su carrera en el circuito se los recordaron al tenista español en Doha. Se cumplen cinco años de su primer triunfo, que llegó en el torneo de Río de Janeiro ante otro español, el catalán Albert Ramos, al que doblegó por 7-6(2), 4-6 y 7-6(2). “Aquello fue como un sueño, lo recuerdo como algo muy especial", señala en Tennis TV un Alcaraz que, pese a que parece que ha pasado mucho tiempo, sólo tiene 21 años.
"En ese momento era todo muy diferente, quizá por eso lo recuerdo como un sueño, aunque también fue una etapa muy complicada debido a la pandemia y todas las dificultades que conllevó dentro del circuito", afirma el español, que vio cómo apenas unos días más tarde se le cortaba la temporada y quedaba encerrado en casa sin poder entrenar.
Tras Río de Janeiro, su siguiente partido fue un Challenger en Italia en el mes de agosto. Aún era el 318 del mundo y sólo le dio tiempo a finalizar la temporada como 138 tras ganar en Alicante y Trieste y jugar las finales de Barcelona y Cordenons. Ya en 2021 llegaría su primer partido en el Grand Slam, su primer título en Umag (Croacia)... "Es increíble que hayan pasado ya cinco años desde aquello. Desde luego que el camino hasta llegar aquí ha sido impresionante, pero esa victoria siempre será inolvidable por ser la primera. He alcanzado muchas de mis metas en este tiempo, he sido número 1 del mundo y he ganado títulos de Grand Slam, por lo que solo puedo definir todo este viaje como un sueño”, señalaba el tenista español en Doha, donde trata de dar el primer paso hacia ese número uno que ahora tiene el sancionado Sinner.
El primer paso era Cilic y, el segundo, sale hoy del duelo entre Luca Nardi y Zhizhen Zhang. "Estoy muy contento de haber salido adelante superando esa situación -el partido ante Cilic-, porque, al final, esa dificultad es la que luego me ha dado la oportunidad de mantenerme en el segundo set, de sobrevivir de alguna manera. Ha sido muy importante mantener la calma en ese instante", afirma el murciano, satisfecho también de ver algo más abierto el panorama futuro con la eliminación de un Dimitrov que siempre le complica mucho la vida.