Djokovic confirma su renuncia

Novak Djokovic ya ha metido la directa en el US Open. Porque ni las lesiones ni su edad están pudiendo con su ilusión. El balcánico ya está en cuartos de final y es firme candidato a ganar su 25º Grand Slam.

Sin embargo, teta y sopa no caben en la boca dice el refranero español. Y fruto de su éxito en tierras americanas ha tenido que modificar su hoja de ruta tanto en lo profesional como en lo personal.

En primer lugar, el tenista serbio se va a perder el cumpleaños de su hija Tara. Y cuando se lo recordaron en la sala de prensa, no pudo esconder su 'espinita': "Desde un principio sabíamos que esto podía suceder, así que ella no estará muy contenta, al final estaré ausente en su fiesta de cumpleaños. No me recordéis estas cosas, por favor (risas). Intentaré ganar, ya que estoy aquí. Voy a intentar ganar y que este sea su regalo. Le enviaré otros regalos también, claro, alguna sorpresa de cumpleaños. Esperemos que una victoria pueda ser algo con lo que ella esté contenta, aunque hay una gran diferencia entre un papá presente y un papá a distancia. Lo sé, pero es lo que toca este año”.

Y, además, tampoco va a poder participar en la Copa Davis con Serbia en la eliminatoria ante Turquía que se disputará entre el 12 y 13 de septiembre, en búsqueda de la permanencia en el Grupo Mundial. De perder el conjunto serbio, Djokovic se quedaría sin poder conseguir la Ensaladera hasta 2027, que era otro de sus objetivos antes de retirarse.

Pese a ello, 'Nole' se muestra feliz del gran papel que está firmando en tierras estadounidenses: "Podría ser el mayor logro de mi carrera, pero todavía está muy lejos. En los dos últimos años aprendí a tomarlo todo partido a partido, aunque seguro que estoy soñando con ganar otro Grand Slam, sería increíble hacerlo aquí. De momento no puedo permitirme ir tan lejos en mis pensamientos, necesito concentrarme en lo que debo hacer para ganar mi próximo parido, mi próximo desafío. El último Grand Slam que gané fue aquí hace dos años, así que sería bonito cerrar el círculo dos años después”.

Por último y sobre su próximo rival, Taylor Fritz, no se fía de su inmaculada racha contra él: "Espero algo diferente, siempre lo espero de los jugadores que nunca lograron vencerme, espero que salgan a la cancha e intenten hacerme sentir incómodo, siendo más agresivos o cualquier otra cosa. No creo que haga ningún cambio importante, obviamente, te adhieres al plan de juego que te ha traído hasta aquí, sabes cuáles son tus puntos fuertes. En su caso, es el servicio y la derecha, sus dos grandes armas. Ha mejorado mucho su movilidad con el paso de los años, el revés también es más sólido, muy plano. Para ser un tipo grande, se mueve bien, creo que está bastante subestimado. Jugamos aquí hace algunos años y fue duro, pero esta vez será un partido nocturno, condiciones totalmente diferentes… o al menos eso es lo que he oído, tal vez no (risas)".