Djokovic manda un aviso claro a Alcaraz y Sinner

Esta semana ha sido un gran éxito para Carlos Alcaraz, pues en el ATP 500 de Rotterdam ha logrado el primer torneo bajo techo de su carrera. Pero esta es solo la confirmación de que ha vuelto a su mejor nivel y poco a poco va encontrando las sensaciones que le faltaron en el Open de Australia. Pero no se puede quedar aquí, pues al murciano ahora le espera un reto aún más grande en otro torneo de esta categoría en Doha. La capital catarí va a reunir a un elenco de la más absoluta élite que recuerda al de un grande.

Para empezar además del español estará Jannik Sinner, quien rechazó estar en Rotterdam por cansancio tras vencer en Melbourne, pero ahora no faltará, además de otro nombre clave, el verdugo de Alcaraz en las antípodas, Novak Djokovic, que ha superado la lesión que le dejó en el dique seco y ahora volverá a las pistas para tratar de demostrar que la edad es un número y seguir luchando contra los nuevos 'capos' de la ATP a sus 37 años. Y por lo que se puede extraer de sus últimas declaraciones, lo va a hacer con perspectiva de ser un rival durísimo.

Estos días he estado en Montenegro siguiendo su proceso de recuperación y allí ha charlado con el portal 'Vijesti', donde ha confesado su situación actual: "Ya no hay rotura en el músculo, la lesión está casi al 100 por ciento curada y estoy listo. Tengo luz verde del equipo médico para entrenar, para prepararme. El torneo en Doha está programado en siete días, así que voy a cumplir el calendario". Aunque tristemente empieza a asumir que el aumento de lesiones de los últimos años "probablemente" se deba a la edad y el paso del tiempo.

Un cuadro digno de 'Grand Slam'

Pese a ser un ATP 500 en Doha se van a reunir muchos de los mejores del mundo, en concreto seis de los diez primeros nombres de la ATP. Además de Sinner, Alcaraz y Djokovic también harán acto de presencia Álex de Miñaur, que ha demostrado en Rotterdam que su estado de forma no es ni mucho menos una casualidad. Al igual que la dupla rusa, Daniil Medvedev y Andrey Rublev, aunque en este caso es cierto que ninguno de los dos pasa por su mejor momento, pero tienen mucho peligro y a poco que consigan reencontrarse con su tenis pueden vencer a quien se cruce en su camino.