Flushing Meadows despierta a la estrella perdida de la WTA

La historia reciente del tenis femenino mundial no se puede entender sin la figura de Naomi Osaka. La jugadora japonesa fue uno de los símbolos de la WTA hace unos años, en una época donde se erigió como la gran dominadora de la pista rápida, sumando hasta 4 Grand Slam y dando un nuevo aire al deporte con una polarizante figura que dominaba en la pista por su imponente físico y se convirtió en un símbolo fuera de ella por sus ideales. No obstante, tras ser madre entró en una espiral de lesiones y problemas de salud mental que acabaron por costarle años en la sombra hasta que este 2025 ha revivido en el US Open.

Cinco años después está de vuelta en las semifinales de un grande tras haber pasado por encima con mucha solvencia de la checa Karolina Muchova. La nipona, actual 24 del mundo, venció en dos sets, por 6-4 y 7-6 en una hora y 49 minutos, certificando lo que serán sus primeras semis desde el Open de Australia 2021. Además de conseguir una revancha personal importante, pues Osaka y Muchova se enfrentaron en la edición pasada de este torneo, con victoria de la checa en segunda ronda.

Pero algo ha cambiado en estos últimos meses, pues la japonesa ha regresado a la élite del tenis mundial, recuperando el juego que la llevó a ser la referencia durante años. Algo que no ha escondido en los micrófonos tras ganar: "Esto significa muchísimo. Me sorprende no estar llorando. Ha habido muchísimo trabajo detrás, que ustedes no han visto, pero estoy muy agradecida a mi equipo y feliz de estar sana".

Un duelo de poder a poder

La clave del partido estuvo en el servicio, pues la japonesa ganó un 75 % de puntos de primer saque por un 73 % de la checa. Aunque en el primer parcial y tras mantener sus servicios con solvencia, Osaka aprovechó una oportunidad en el décimo juego y se puso 15-40 con tres pelotas de 'break' y set, lo que certificó a la segunda, quedando a un paso del triunfo ante una Muchova que arrastró molestias físicas durante buena parte del partido. Aún con ellas en el segundo parcial quebró dos veces el servicio de Osaka, pero la japonesa recuperó los dos para forzar el 'tie-break'. Ahí Osaka sacó su mejor tenis, moviendo a Muchova de lado a lado de la pista y terminó cerrando el duelo a lo grande, certificando su pase a semifinales y un gran salto en el ranking, retornando al top 20 tres años después.