Medvedev y su retirada del tenis

Daniil Medvedev no levanta cabeza en cuanto a títulos se refiere. El exnúmero 1 del mundo y ganador de Grand Slam lleva ya dos años sin abrir sus vitrinas, precisamente desde que lo hiciera en Roma, donde ya se encuentra deseoso de poner fin a esta mala racha que ya le obsesiona y que hace que muchos le pregunten si está cerca su retirada.

Y en la previa de dicho torneo, el tenista ruso ha hablado alto y claro sobre ello: "Siento que ganar aquí hace dos años me dio mucha serenidad y me ayudó a entender mejor esta superficie. Obviamente, prefiero jugar en pistas duras, pero desde que fui campeón en el Foro Itálico no he vuelto a perder los estribos en una pista de arcilla, soy una persona más optimista y creo mucho más en mis posibilidades de firmar buenos resultados. Nunca pensé que ganaría un Masters 1000 en tierra batida, pero lo conseguí y ahora estoy otra vez aquí con cosas por demostrar, así que vamos a por todas".

Cuestionado precisamente por la importancia que tiene la confianza y por si cree que sus mejores años en el tenis ya han pasado, Medvedev se muestra contundente: "Mi motivación es ser mejor cada día. El año pasado no ofrecí mi mejor versión, no fui un tenista reconocible, pero siempre que llego a un torneo, lo hago con la mentalidad de que puedo ganarlo. Necesito tener algo de suerte para que todo lo que estoy trabajando, se plasme en buenos resultados. Lo que tengo claro es que cuando me retire del tenis, quiero hacerlo sabiendo que di lo mejor de mí y que no tengo nada que reprocharme".

Su último verdugo ha sido Casper Ruud, quien le demostró su destreza en la superficie de tierra batida en Madrid para ganarle por primera vez en su carrera. Un partido que terminó con 6-3 y 7-5 y que dejó al ruso sin su billete para las semifinales del Masters 1000 de Madrid.

Cabe recordar que actualmente se encuentra fuera del top-10 del ránking ATP y que para volver a él tendrá que firmar un buen papel en tierras romanas, donde el español Carlos Alcaraz y el italiano Jannik Sinner parten como los dos grandes favoritos. Sobre todo este último, quien contará con una afición volcada tras ser el primer evento en el compite después de la sanción de 3 meses que acordó por su positivo en clostebol.