Murray deja su presencia en el aire

Aunque fue el primero de los integrantes del Big 4 en alejarse de las pistas, su condición de británico y de bicampeón del torneo le convierten en una de las figuras imprescindibles cada año en la hierba de Wimbledon. Hablamos del espigado escocés Andy Murray, cuya presencia en la edición de 2025 del torneo londinense está en el aire, según se desprende de unas declaraciones realizadas al diario The Guardian.

"En principio, no tengo planes de ir a Wimbledon. No trabajo allí y no suelo ir a ver tenis como aficionado, aunque si uno de mis hijos quisiera ir a ver algún partido, obviamente le llevaría, o también si algún jugador británico llegara a la final", ha explicado el escocés en unas palabras que no dejan claras del todo sus intenciones.

Para Murray, por tanto, todo parece quedar a la improvisación o, al menos, no tiene previsiones de acercarse hasta el All England Lawn Tennis Club, como sí hiciera por ejemplo un par de años atrás: "Fui a la final entre Djokovic y Alcaraz hace un par de años, sólo porque tenía la sensación de que iba a ser un gran partido", admitió el de Glasgow, cuya retirada oficial se pospuso hasta 2024 pese a que los últimos años estuvo muy lastrado por las lesiones.

El extenista de 38 años, padre de cuatro hijos, no tiene por cierto especial interés en que alguno de ellos siga sus pasos, según apuntaba en la citada entrevista: "No son buenas tenistas, pero mi hija mayor jugó ayer su primer partido en el colegio. Golpeé un par de pelotas con ella por la mañana y me decía que era malísima. Luego quedó invicta. Ella y su compañera ganaron sus partidos. Nos sorprendió un poco que su nivel fuera tan alto, así que las dos le pegan un poco, pero no mucho", insiste.

Futuro prometedor

Andy Murray también ha tenido palabras para el mejor exponente actual del tenis británico, el joven Jack Draper, número 6 del ranking ATP y que esta pasada semana alcanzara las semifinales del HSBC Championship, en Queen's, donde cedió ante el checo Jiri Lehecka precisamente en la Andy Murray Arena.

"No me sorprende que esté ahí arriba. Entrené bastante con él cuando era más joven, y es muy bueno. Tiene un juego brillante. Es un tipo grande, zurdo, con una gran derecha y un revés muy consistente. También se mueve muy bien para ser tan alto. Ha tenido muchas molestias y lesiones, pero este año ha estado en forma la mayor parte de la temporada y su clasificación está donde debería estar y donde se merece", ha elogiado.

Murray, ganador de tres títulos de Grand Slam (Abierto de Estados Unidos 2012 y Wimbledon 2013 y 2016) y doble campeón olímpico en individuales (Londres 2012 y Río de Janeiro 2016), sigue siendo una celebridad y todo un ídolo en su país, y por supuesto en el All England Lawn Tennis Club. ¿Se le verá por allí en 2025 compartiendo recuerdos con Rafa Nadal, Novak Djokovic y Roger Federer? Es un misterio que se desvelará en unos días, aunque de momento no entra en sus planes... o eso dice.