Zverev confirma que es peligroso en París

Pensar que el tenis le debe algo a algún jugador es algo que casi siempre suele ser cuanto menos una quimera, sin embargo, en el caso de Alexander zverev en Roland Garros puede tener cierto sentido. En las dos últimas ediciones el alemán ha pasado por muchas cosas en París y no todas buenas, de hecho, la mayoría han sido muy complicadas de gestionar. Para empezar en 2023, cuando en semifinales se enfrentó a Rafa Nadal y tras perder un primer set agónico, cuando estaba en el segundo sufrió una durísima lesión de tobillo que lo sacó en sillas de ruedas de la Philippe Chatrier.

Un año más tarde, hace exactamente 12 meses, consiguió pasar de esa ronda y se plantó en la gran final. Esta vez sin problemas físicos disputó un gran partido contra Carlos Alcaraz, pero en el quinto set, el español fue más fuerte y acabó conquistando su primera Copa de los Mosqueteros. Un duro palo para el Hamburgués, que sigue buscando su primer grande, pues tiene un palmarés envidiable con Masters 1000, dos ATP Finals, otros dos oros olímpicos, pero le queda la guinda, la misma que ha estado hasta tres veces a punto de lograr.

Un comienzo superlativo

Este 2025 aspira a todo en Roland Garros. Pese a no venir de su mejor temporada ni mucho menos, si que tiene todos los mimbres para ser considerado de los más fuertes en la arcilla parisina. Para empezar tenía un partido bastante complicado ante Learner Tiern. El joven estadounidense no es ni mucho menos un buen terrícola, pero ya ha mostrado varias veces que el talento existe. Ya en el Open de Australia se cargó al anterior finalista, Daniil Medvedev, pero en la capital gala no ha podido hacer lo mismo, terminando por pagar la inexperiencia.

En tres sets, sin sufrir apenas y con mucha seguridad. El saque de 'Sasha' es un seguro y el día que funciona es es un valor incalculable. Este inicio de torneo ha sido uno de esos días, pues no ha tenido la más mínima duda, pegándole muy fuerte y encimando siempre al joven Tien, que no las veía venir. Al final en sets corridos, con un 6-3, 6-3 y 6-4, el número 3 del mundo ya está en la segunda ronda, donde se medirá al ganador del De Jong-Passaro. En todo caso, no tiene un cuadro muy duro y eso hace indicar que acabará muy tarde la segunda semana.