Alex Abrines hace oficial la decisión más temida

El Barça está pendiente de una decisión de Alex Abrines. A su capitán le queda un año de contrato, pero, dado el poco protagonismo que ha tenido este año, a su alta ficha y a que le han fichado alternativas para su posición, el club le planteó la rescisión de su contrato, cobrando parte de lo que tenía formado para la próxima temporada.

La respuesta estaba pendiente, pero también lo que podría ser la retirada de un jugador que, de no haber dado un paso al lado, aún está para jugar en la selección española. La marcha de Abrines liberaría una ficha importante y ayudaría a acometer las pocas incorporaciones que aún le quedan por hacer al Barcelona.

Se esperaba una respuesta del jugador antes del fin de semana, ya que entonces empieza su campus y él aparecerá ante los medios. No ha esperado hasta entonces y, para que no le pregunten al respecto, ha dejado claro que está en un proceso de meditación y que la temida retirada la tiene muy presente.

Alex Abrines pide tiempo

"Me estoy tomando el tiempo para pensar en todas las opciones, la retirada es una de ellas. Me quiero tomar el mes de julio para sopesar todo y, conforme a lo que más me llame y mi cuerpo me pida, tomaré una decisión", señala el alero balear, que en los últimos meses siempre dejó claro que su idea era cerrar su contrato el próximo año, pero que ahora ya no lo tiene tan claro. "Lo veo como otra opción. La más fácil es quedarme en el Barça, pero está la opción de la retirada y, al final, necesito tiempo para pensarlo todo. Lo habré decidido de aquí a final de mes", advierte Alex Abrines.

El motivo por el que haya llegado a esa situación es porque se ve cambiando de aires, algo que no le apetece. "Hay opciones de contrato y logística con la familia que, cuando tienes dos hijas, cuesta más moverse de la ciudad. Y hay otras motivaciones. Estoy contento con todo lo que está pasando, pero hay cosas que no me quiero perder de mis hijas", afirma.

Abrines también se refirió a su ausencia en la lista de Sergio Scariolo para el Eurobasket, algo que ya dejo caer hace unos meses. "Era una decisión que me costó tomar, pero después de dos años encadenados sin descanso, necesitaba descansar física y mentalmente. Tuve una pequeña intervención que me apartó unas semanas. Mi cuerpo me pedía descansar. Hablé con Sergio Scariolo y lo entendió perfectamente", reconoce.