Portazo al turismo en la Costa del sol

La Costa del Sol es uno de los destinos favoritos para pasar las vacaciones durante los meses de verano, con ciudades como Málaga, Fuengirola, Marbella, Benalmádena, el Rincón de la Victoria o Nerja, entre otras. Destinos con playa muy atractivos que siempre suelen ser de los más destacados para el turismo, ya sea entre los propios españoles como visitantes de países extranjeros. Sin embargo, este año la Costa del Sol está viviendo unos registros preocupantes.

No es que no haya turismo pero es cierto que a simple vista se ve que ha bajado de forma notable la gente que apuesta por esta famosa zona de España, que demuestra un problema mayor en el país, con unos ingresos cada vez más justos que se reflejan en un cambio notable en las vacaciones.

Bajón significativo del turismo en la Costa del Sol

La Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol, también conocida como Aehcos, ha estado haciendo balance sobre los datos del turismo durante esta temporada y han comunicado su preocupación, a pesar de que sigue siendo uno de los principales destinos españoles. Según Javier Hernández, vicepresidente de esta asociación, ha habido una tendencia a la baja en el turismo, con menos visitantes que otros años y también menos tiempo en sus estancias.

"Hemos cerrado junio con un 88% de ocupación hotelera, 0,27 puntos por encima del año pasado, pero las previsiones para julio y agosto son más bajas" confiesa Hernández a los micrófonos de 101TV, dejando claro que a pesar de que junio haya sido muy buen mes, el turismo ha caído en los principales meses de verano. "No es normal que junio supere en ocupación a julio, lo que refleja un cambio de comportamiento en los turistas y una desestacionalización del destino" añade el vicepresidente, que por los datos que manejan sobre julio y agosto aseguran que es el peor año para el turismo desde la pandemia, con una caída de hasta el 8%.

Los problemas económicos sentencia el turismo

A pesar de que pocas familias quieren prescindir de sus vacaciones, a no ser que realmente se vean muy apurados económicamente, es cierto que el cada vez menor poder adquisitivo de las familias españolas se refleja en una bajada significativa tanto del turismo como del tiempo de alojamiento en el destino de viaje. "Se está reduciendo la estancia media en el mercado nacional. Los precios del supermercado, la gasolina y el IPC han reducido su capacidad de gasto" confiesa Hernández.

De hecho, en la Costa del Sol cada vez hay más turistas extranjeros que nacionales. El 70% de los visitantes en junio fueron internacionales mientras que sólo hubo un 30% de turistas nacionales. Por otra parte, aunque los turistas extranjeros no se vean tan afectados por esta situación económica, también han cambiado sus tendencias.